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La puesta en funcionamiento de este servicio fronterizo favorece fundamentalmente a los paraguayos y argentinos residentes en la zona compartida.
La balsa había dejado de operar en diciembre del año pasado debido a la crecida de río Paraguay, que inundó la zona portuaria de la orilla argentina. A pesar del descenso de las aguas, que ya se produjo a mediados de este año, las autoridades argentinas demoraron en volver a poner a punto las oficinas en el puerto formoseño, a lo que se sumaron los trámites burocráticos que fueron postergando la determinación.
Numerosos vehículos ya realizaron ayer el cruce y se espera que en los próximos días se incremente la cantidad de usuarios, considerando las promociones comerciales que se realizan en esta ciudad con el objetivo de atraer a turistas de compra del nordeste argentino hacia nuestro país. El servicio se realiza de mañana y tarde.
En caso de que aumente la demanda del servicio, los encargados de la balsa anunciaron que podrían incorporar una embarcación de mayor capacidad.
Los usuarios resaltaron la importancia de la reanudación del servicio, considerando la posibilidad de acceder a distintos puntos del país vecino, acortando distancia y ahorrando costos. Igualmente, algunos pobladores utilizan este medio para trasladarse por rutas argentinas a la capital de nuestro país, Asunción.