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La obra data de hace más de 200 años y fue construida durante el periodo colonial de dominación española.FUERTE OLIMPO, Dpto. de Alto Paraguay (Carlos Almirón, corresponsal). El intendente local, Sergio Cuéllar (ANR), dijo que lamentablemente la institución que preside no cuenta con recursos necesarios para la restauración del emblemático monumento.
"En estos días limpiamos alrededor del fuerte que se encontraba rodeado de maleza. Sin embargo, la construcción que data del año 1792 se encuentra bastante deteriorada debido al paso de los años. Es necesaria la contratación de profesionales para este tipo de trabajos y necesariamente esto cuesta mucho dinero", acotó.
Indicó que formaron una comitiva, viajaron a la capital del país y realizaron los primeros contactos con las autoridades.
"Encontramos una negativa total de los responsables de la Agencia de Cooperación de Desarrollo Española, cuyo responsable, Alberto Quintana, alegó que no cuentan con rubros para este tipo de ayuda y tampoco la Embajada de su país dispone de medios para dicho menester", destacó el jefe comunal.
En contrapartida encontramos buena predisposición de la ministra de Turismo Liz Crámer y del propio titular de la cartera de Obras Públicas, Efraín Alegre, quien prometió que en breve enviará a la comunidad técnicos de la Dirección de Patrimonios Históricos para evaluar la situación e inmediatamente se iniciarán los trabajos", dijo Cuéllar.
Historia
El fuerte fue construido durante la dominación española con el objetivo de frenar las invasiones de los portugueses en territorio de la corona.
Fue inaugurado el 25 de setiembre de 1792 por el capitán Antonio Zavala y Delgadillo, al principio solo una parte de la construcción era de piedra, ya que el resto era de maderas y palmas.
Durante el periodo de independencia, el doctor José Gaspar Rodríguez de Francia mandó terminar el monumento totalmente de piedra. Asimismo construyó una enorme muralla del mismo material de más de 1.300 metros que rodeaba al fuerte y servía para la cría de animales vacunos.
El emblemático fuerte sirvió por varias generaciones como baluarte de la soberanía nacional, ya que el peligro de acoso de países vecinos que no reconocían nuestra independencia siguió por varios años a pesar de la declaración de país libre.
"En estos días limpiamos alrededor del fuerte que se encontraba rodeado de maleza. Sin embargo, la construcción que data del año 1792 se encuentra bastante deteriorada debido al paso de los años. Es necesaria la contratación de profesionales para este tipo de trabajos y necesariamente esto cuesta mucho dinero", acotó.
Indicó que formaron una comitiva, viajaron a la capital del país y realizaron los primeros contactos con las autoridades.
"Encontramos una negativa total de los responsables de la Agencia de Cooperación de Desarrollo Española, cuyo responsable, Alberto Quintana, alegó que no cuentan con rubros para este tipo de ayuda y tampoco la Embajada de su país dispone de medios para dicho menester", destacó el jefe comunal.
En contrapartida encontramos buena predisposición de la ministra de Turismo Liz Crámer y del propio titular de la cartera de Obras Públicas, Efraín Alegre, quien prometió que en breve enviará a la comunidad técnicos de la Dirección de Patrimonios Históricos para evaluar la situación e inmediatamente se iniciarán los trabajos", dijo Cuéllar.
Historia
El fuerte fue construido durante la dominación española con el objetivo de frenar las invasiones de los portugueses en territorio de la corona.
Fue inaugurado el 25 de setiembre de 1792 por el capitán Antonio Zavala y Delgadillo, al principio solo una parte de la construcción era de piedra, ya que el resto era de maderas y palmas.
Durante el periodo de independencia, el doctor José Gaspar Rodríguez de Francia mandó terminar el monumento totalmente de piedra. Asimismo construyó una enorme muralla del mismo material de más de 1.300 metros que rodeaba al fuerte y servía para la cría de animales vacunos.
El emblemático fuerte sirvió por varias generaciones como baluarte de la soberanía nacional, ya que el peligro de acoso de países vecinos que no reconocían nuestra independencia siguió por varios años a pesar de la declaración de país libre.