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El afectado, muy apenado, relató durante una visita a nuestra redacción todo lo que tuvo que pasar en los últimos 18 años, a consecuencia de la demanda presentada por el ocupante de su tierra.
"Es una lástima lo que pasa. Hace 18 años que peleo por una tierra que legítimamente me corresponde y ahora me sacan", dijo Eleuterio Pereira.
Relató que en 1955, cuando vio que Agustín Pereira vivía en casa de vecinos, junto con su madre, él lo llamó y le dijo que podía darle permiso para construir un ranchito en una parte de su propiedad de 18 hectáreas, para no estar viviendo siempre en tierra de extraños.
"Es mi pariente y no me gustaba como vivía", señaló. Agustín Pereira aceptó el ofrecimiento y construyó una casita en una de las cabeceras de la propiedad. Con el tiempo, comenzó a trabajar la tierra. Grande fue la sorpresa de don Eleuterio, cuando 30 años después, su pariente le inició un juicio por usucapión (derecho que se tiene sobre la tierra por haber ocupado por mucho tiempo, sin que nadie la reclame) y hasta consiguió apropiarse de gran parte del terreno que le pertenece.
El juicio sobre usucapión se inició en el año 1985, contra Servanda Ortega, bisabuela de don Eleuterio, quien para ese entonces ya había fallecido, por ello todo se anuló. Sin embargo, Agustín Pereira, el demandante, insistió e inició un nuevo juicio esta vez contra el ocupante del inmueble Eleuterio Pereira. El 1 de febrero de 2000 el juez de primera instancia en lo civil y comercial del quinto turno hizo lugar a la demanda por usucapión y declaró la prescripción adquisitiva de dominio a favor de Agustín Pereira, sobre una fracción de 8 Ha del inmueble.
El abogado de la parte demandada recurrió dicha sentencia, pero la Corte Suprema de Justicia rechazó la apelación y confirmó la resolución que daba la razón a Agustín Pereira.
"Ya estoy viejo -76 años- tengo problemas del corazón; tengo siete hijos y es muy triste lo que pasa conmigo", manifestó con mucho pesar el septuagenario.