Si bien el clima es altamente favorable para la proliferación de las plagas, por las constantes precipitaciones que disminuyen la eficacia de los insecticidas, también es cierto que una vez más resalta la poca atención de los técnicos del MAG, quienes son los que deben dar las orientaciones adecuadas y oportunas para combatir estas plagas.

Honorato Morel Agüero, un labriego de la compañía Rosario del distrito de San Pedro de Ycuamandyyú, comentó que entre sus vecinos unas 80 hectáreas están muy afectadas y que es nula la presencia de técnicos. Cada productor debe agenciarse y luchar para defender sus parcelas, expresó el agricultor que observa cómo los pequeños pero muy dañinos gusanitos están destrozando sus cultivos. El productor señaló que ya probó de todo, y gastó más de 500.000 guaraníes en insecticidas y pulverización, pero no logra un control efectivo sobre los enemigos del algodón.

El ataque de los "yso ka’i" es muy generalizado en este distrito. Existen quejas en distintas zonas, algo que afectará notoriamente el rendimiento por hectárea, porque hace que las cápsulas se abran prematuramente a consecuencia de que quedan sin hojas y sin protección del sol, lo que adelantará sin duda el periodo de cosecha, que así como está la situación ya se registrarán en unos 15 días más, sostuvo don Honorato.

Con la masiva aparición del "yso ka’i", la expectativa de rendimiento bajó considerablemente. Ahora en las parcelas afectadas solo podrían obtener unos 800.000 kilos cuando que esperaban un rendimiento superior a los 1.200 kilos por hectárea. Para paliar esta situación ahora esperan que el precio arranque por lo menos en G. 2.200 por cada kilo; si es inferior a los 2.000, muchos no cosecharán, expresaron algunos algodoneros.