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YAGUARÓN (Emilce Ramírez, de nuestra redacción regional). El obispo de la diócesis de Carapeguá, monseñor Celestino Ocampo Gaona, tiene marcada una audiencia para las 09:00 con el titular del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), Arnoldo Wiens. El prelado indicó que antes de la adjudicación de los trabajos de restauración y puesta en valor del templo San Buenaventura, es necesario aclarar algunos puntos del proyecto.
La construcción de la iglesia data de 1755 (hace 263 años). Es considerada como la “Maravilla de Arte Barroco-Franciscano-Guaraní”, pues en el sitio se conservan tallados y pinturas originales.
Monseñor Ocampo Gaona dijo que recibió una nota del ministro Wiens en la que le informa que las obras están en proceso de licitación y que de acuerdo al plan se dividirán en dos etapas.
Anunció que como obispo responsable del clero de Paraguarí y sus bienes, solicitará que antes de que sea adjudicada la obra se conozcan a cabalidad los antecedentes de las empresas interesadas.
Por ejemplo, es necesario saber si las firmas tienen experiencia en desmontaje, montaje y restauración de patrimonios o reliquias históricas como es el caso del templo de Yaguarón.
Refirió que en varias ocasiones la comunidad tuvo que salir a defender la iglesia de los atropellos, como el caso de la C&C adjudicada en el año 2015 y que luego fue suspendida por recomendación de la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP) por falsificación de documentos. El obispo dijo que hizo un desastroso desmontaje.
Con tal de abaratar el costo de la mano de obra la empresa adjudicada habría contratado a personas sin experiencia. Entraron al templo a desmontar con pata de cabra y a sustituir piezas con maderas que llevaban de cualquier carpintería, precisó el obispo.
“Voy a solicitar al ministro es que sea adjudicada la empresa que tiene experiencia en restauración de templos o patrimonios históricos y que se comprometa que será un trabajo responsable, continuo y serio”, expresó monseñor Ocampo.
Asimismo, pedirá que representantes de la Iglesia y la comunidad participen del proceso de verificación de los trabajos.