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La quema de documentos fue descubierta el martes 17 en el domicilio del jefe del Departamento de Tránsito de la institución, Óscar López. Ese día, el fiscal Julio César Yegros lacró los accesos de la comuna por orden de la fiscala Marta Romero, para aguardar la llegada del fiscal de turno, Lorenzo Lezcano.
La denuncia fue presentada por un grupo de concejales y el intendente electo, Carlos César Haitter (PDP). Pidieron que el funcionario Óscar López sea indiciado e imputado por el hecho.
Además, solicitan ampliar la investigación sobre personas innominadas que pudieron haberlo instigado. En ese sentido, apuntan al exintendente Eduardo Paniagua (ANR), el actual jefe comunal interino, José Gabriel Duarte (ANR), el secretario general, Julio Ibarrola, y el contador Ricardo Servián.
Señalan que “la seria intención de aniquilar valiosa documentación con logotipo y sello oficial e institucional” tendría como objetivo frustrar la investigación de delitos de corrupción y mal manejo de los fondos públicos municipales.
En otra parte de la denuncia presentada por Haitter y varios concejales se acusa directamente al exintendente Paniagua de contar con numerosos testaferros en empresas adjudicadas con obras.
Piden que todos sean investigados por frustración y ejecución penal, alteración de datos relevantes para la prueba, estafa, lesión de confianza, exacción, apropiación y enriquecimiento ilícito.