Cargando...
CORONEL OVIEDO, Dpto. de Caaguazú (Carlos Mariano Godoy, de nuestra redacción regional). La Cooperativa Coronel Oviedo Ltda. inauguró en el año 2011 una fábrica de alcohol con el objetivo de apoyar a sus socios cañicultores. Sin embargo, a dos años de la puesta en marcha de la industria que costó casi G. 70.000 millones, los directivos de la entidad decidieron venderla.
La Cooperativa movilizó a sus socios para el cultivo de la caña dulce. Se formaron comités con financiamiento de la entidad para que no falte la materia prima y los productores se comprometieron a proveer sus cosechas a la planta alcoholera, pero no cumplieron en su totalidad, explicó el gerente licenciado Roberto Melgarejo.
“Se han invertido unos G. 8.000 millones en préstamos para acompañar a los cañicultores, pero en las dos zafras pasadas la industria solo generó pérdidas económicas, teniendo en cuenta que solo pudo trabajar unos meses por la falta del takuare’ê (caña dulce) que debía ser proveído por los socios”, explicó.
Indicó que la Cooperativa tiene 700 socios cañicultores y actualmente hay unas 2.400 hectáreas de caña dulce. Sin embargo, se necesitan unas 3.300 hectáreas para que la industria pueda trabajar con toda su potencia con el objetivo de llegar a la producción de 70.000 litros de alcohol por día, indicó.
Imposible competir
El licenciado Roberto Melgarejo dijo que es imposible competir con Petropar que paga G. 200.000 la tonelada de la materia primera, mientras la Cooperativa solo puede abonar G. 160.000.
“Pero esto tiene una explicación: Petropar puede pagar ese precio ya que es una empresa subsidiada por el Estado y no necesita cerrar números. En cambio, nosotros sabemos cuánto es lo máximo que se puede pagar para seguir adelante”, dijo.
Se estima que las pérdidas superarían los G. 18.000 millones. Esta situación deficitaria obligó a los directivos y socios de la Cooperativa a analizar la cuestión y en una asamblea realizada el 25 de febrero de este año los socios autorizaron a los directivos a iniciar el proceso de venta de la fábrica, poniendo como base el precio de G. 60.000 millones.
Interesados
El licenciado Melgarejo manifestó que ya existen algunas empresas extranjeras que están haciendo
averiguaciones sobre la planta, como también capitalistas individuales de nuestro país que están demostrando interés en la compra de la fábrica. Igualmente, Petropar manifestó intención de adquirir
la industria, con el objetivo de aumentar su producción de alcohol en la región, pero que solo son conversaciones informales hasta ahora.
El cooperativista lamentó que los cañicultores no se hayan adueñado de la fábrica de etanol, porque
el anhelo de la entidad solidaria era industrializar la caña dulce, producir alcohol para que los socios que pusieron gran parte del dinero para construir la industria tengan mejores ingresos.