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El director del hospital de Villa Hayes, doctor Orlando Ojeda, relató que el niño José Carballo amaneció con un cuadro de salud estable, lúcido, consciente, sin ninguna patología aparente y a la espera del resultado de unos estudios. El menor sería dado de alta hoy.
El menor estuvo perdido 29 horas en un monte de la comunidad San Carlos, distante 100 kilómetros del centro urbano del distrito de Fuerte Olimpo, capital del departamento de Alto Paraguay.
El doctor Ojeda indicó que los especialistas quieren asegurarse de que pueda retornar a su casa sin ninguna complicación de salud, ya que pasó 29 horas expuesto a un frío intenso, lo que le produjo deshidratación e hipotermia. El profesional mencionó que le llamó la atención la resistencia que tuvo el pequeño ante las condiciones adversas.
Comentó que hay casos en que el cuerpo humano entra en hipotermia con temperaturas menos extremas. “La resistencia de este chico es impresionante; esto demuestra también que el cuerpo humano se adapta”, dijo.
“Apenas podía gritar”
Sixta Arce, mamá del niño José Carvallo, dijo que el pequeño tenía mucha hambre y pocas fuerzas que apenas podía gritar para hacerse escuchar.
“Me dijo que entró a buscarle a un señor y como no lo encontró, desvió el camino y se perdió en el bosque. Él vive allí porque va a la escuela (en San Carlos). La esposa del señor le encargó que vaya a buscar a otra persona, desvió a un almacén y se perdió en el bosque”, relató Sixta en conversación con radio ABC Cardinal.
“Muchos le vieron que salió del almacén, pero no sabían hacia qué lugar se fue. La casa desde donde salió no está lejos del sitio al que se fue. Se entretuvo con sus ovejas y se perdió. Luego vio un perro, lo siguió y se perdió”, continuó.
“Contó que caminó muchísimo, buscaba dos antenas de telefónica para guiarse. Ya no podía gritar, estaba demasiado cansado (...). Me dijo que durmió y les soñó a sus hermanos. Tiene cuatro hermanos. Me dijo: ‘Al despertarme se me entumecieron las manos y los pies’. Veía vacas, pero quería encontrar las antenas. Para hidratarse tomó agua del fruto del karanda’y. Cuando le encontramos no nos podía hablar”, manifestó doña Sixta.
Su madre se hará cargo
Sixta Arce dijo que llevará a su hijo a vivir con ella en Fuerte Olimpo para poder seguir tratamiento médico que le permita recuperarse totalmente de las consecuencias que pudo haberle ocasionado la hipotermia. Por otro lado, ayer comentó que recibió mucha ayuda de personas solidarias, que le entregaron abrigos y dinero estando en el hospital de Villa Hayes.