Juzgados de Paz del Chaco están en completo estado de abandono

Las sedes de los juzgados de paz de los distritos de Teniente Irala Fernández y Villa Hayes (Dpto. de Presidente Hayes) se encuentran en completo estado de abandono. Los locales judiciales no cuentan con las mínimas comodidades para funcionar y algunas hasta parecen simples taperas. Los pedidos de los funcionarios para mejorar los sitios son innumerables. Sin embargo, la Corte Suprema de Justicia (CSJ) no hace caso a los reclamos.

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TTE. MANUEL IRALA FERNÁNDEZ, Dpto. de Presidente Hayes (Rocío Portillo, corresponsal). Una de las sedes en peores condiciones es el Juzgado de Paz ubicado en la colonia Tte. 2º Adolfo Rojas Silva de este distrito chaqueño. El local, a cargo de la magistrada Fátima Franco Carmona, está sin techo desde el año 2015.

Una tormenta que había azotado la zona ese año destechó la precaria vivienda. Actualmente, los funcionarios cumplen con sus funciones en el pasillo de un cuartel de las Fuerzas Armadas.

“No tenemos las mínimas comodidades y ejercemos nuestro trabajo en condiciones infrahumanas”, expresó Carmona la ser consultada sobre el estado del sitio.

Indicó que se ubicaron en el cuartel para continuar ofreciendo los servicios, mientras aguardaban la reparación de la oficina o la construcción de una nueva sede. Sin embargo, pasaron dos años y no hay nada.

Añadió que el año pasado el ministro de la Corte Suprema de Justicia (CJS), César Garay, visitó el local y constató la situación del local. Señaló que en ese entonces prometió la reparación, pero nunca se cumplió.

Nido de alimañas

Otro local en lamentables condiciones es el Juzgado de Paz de Campo Aceval, a cargo de la doctora Gissela Picco. La magistrada señaló que la oficina, cuya estructura es de madera, fue donada por unos pobladores menonitas hace 20 años. Dijo que nunca recibió mantenimiento y actualmente se encuentra en pésimo estado.

Relató que no hace mucho ella y otra funcionaria, abogada Gladys Cordone, fueron víctimas de la mordedura de una serpiente. Señaló que el local es un nido de todo tipo de alimañas, por lo que decidieron mudar la atención a un centro comunitario de la localidad, mientras se hacía una reparación y desinfección.

Sin embargo, la estructura no fue reacondicionada como se debe y los trabajos se limitaron a pintar las paredes.

Otro juzgado en pésimo estado se encuentra en la zona de Pozo Colorado (Villa Hayes). La sede, a cargo de Daniel Ledesma, funciona en una vivienda alquilada y actualmente está invadida por abejas y las paredes cubiertas de humedad.

De acuerdo a los datos, los informes sobre el estado como también pedidos de arreglos de los juzgados están a cargo del jefe de Gabinete, Luis Molas. Sin embargo, el funcionario no cumple su función y más bien se pasa amedrentando a los magistrados que realizan las denuncias, dicen.

Intentamos conocer la versión de Molas, pero no atendió su celular.

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