Cargando...
PIRAPÓ, Dpto. de Itapúa (Juan Augusto Roa, de nuestra redacción regional). El centro de formación funciona en las instalaciones del antiguo Centro de Desarrollo Forestal (Cedefo), donde en la década de 1980 se desarrolló una importante tarea de investigación y educativa en el área forestal, con financiación del Gobierno del Japón a través de su organismo de cooperación internacional, JICA.
El Centro de Formación de Técnico Superior Forestal (Cefotesfor) funciona en la modalidad internado mixto, es decir, para mujeres y varones, con capacidad de matriculación de 38 estudiantes por año. La potencialidad de las instalaciones, sin embargo, no es aprovechada en un 100%, pues dispone de infraestructura suficiente como para duplicar la cantidad de estudiantes, en pabellones diferenciados por género.
El Cefotesfor depende de la Dirección General de Educación y Extensión Forestal del Instituto Forestal Nacional (Infona). A diferencia de las escuelas agrícolas, esta es una institución de formación de técnicos superiores, con el nivel de bachillerato ya concluido, explicó su director, Ing. forestal Darío Giménez. “Antes la institución estaba desaprovechada, contaba con apenas 15 alumnos. Iniciamos una campaña y en dos años logramos casi triplicar el número”, refirió.
Hasta tal punto el centro ganó prestigio que jóvenes de todo el país se postulan cada año por obtener un lugar en la institución. El ingreso se logra mediante exámenes de admisión, donde “además de las aptitudes académicas observamos la cuestión de la actitud del estudiante”, dijo Giménez.
Las asignaturas de admisión son matemáticas, comunicación y ciencias naturales. El curso dura dos años y los jóvenes egresan con el título de Técnico Superior en el área de las Ciencias Forestales, con formación integral en materia de administración y gestión de fincas agroforestales e industrias forestales.
Los últimos meses del segundo año, con una carga de 600 horas, los estudiantes realizan pasantías en empresas de la zona, donde reciben un adiestramiento laboral que les permite pulsar adecuadamente su futura actividad profesional.
El perfil de los egresados abarca desde elaborar proyectos forestales, interpretar y ejecutar planes forestales, operar equipos y maquinarias forestales, la utilización correcta de instrumentos de medición y control, manejar bancos de germoplasma forestal (semillas) e instalación y manejo de viveros forestales.
Asimismo, se les enseña a manejar todo tipo de suelo forestal, planificar, gestionar y administrar los recursos económicos y materiales para los trabajos propios de su área, ejecutar trabajos de plantaciones forestales.
Son instruidos asimismo para identificar y controlar plagas forestales, hasta conocer, manejar y controlar el cumplimiento de las normativas y la legislación vigente para las actividades forestales, además de recibir la formación en valores como disciplina, honestidad y respeto.
Los interesados en estudiar en la institución pueden llamar al 0971-107444.
Costo cero
Por una cuestión de presupuesto el número máximo de estudiantes que pueden admitir por año es de 40. Este número se puede aumentar, pero para ello se deben asignar más recursos, pues todo es gratuito para el estudiante, desde el alojamiento, la alimentación hasta aranceles. Literalmente, los estudiantes no gastan ni en fotocopias para los exámenes, explicó el director del Centro de Formación de Técnico Superior Forestal (Cefotesfor), Ing. For. Darío Giménez.
En su gran mayoría los estudiantes vienen de lugares muy distantes al departamento de Itapúa. Curiosamente, uno solo es de la zona, el resto viene desde todos los puntos del país, incluso desde San Pedro Norte, refirió el director.
Buscan autosustentabilidad alimentaria
Uno de los objetivos que se propone el director del establecimiento es llegar a la autosustentabilidad del Centro en lo que refiere a la cobertura de alimentación. Los estudiantes trabajan en la producción de hortalizas, mandioca, frutas y ganado menor, que se emplean en la alimentación diaria.
“Esta es una institución forestal, pero buscamos una formación integral del estudiante, pues una finca forestal no puede estar disociada de la producción agrícola, de la producción para la sustentabilidad de la finca”, explicó el director, Ing. Darío Giménez.
Infraestructura
El Cefotesfor cuenta con aulas, laboratorio, un taller de carpintería equipado donde se fabrican muebles de calidad y que sirve de escuela para las prácticas. Tiene viveros donde se producen plantines de árboles nativos y exóticos, de yerba mate y frutales. Una de las cuatro unidades de viveros se emplea para la producción de tomate y locote destinados a la alimentación de los estudiantes.
El centro de formación cuenta con cuatro viveros que tienen capacidad de producción de 65.000 plantines cada uno, una chacra de experimentación forestal de unas 50 hectáreas, así como superficies destinadas a la producción de alimentos, corral para ganado menor, huerta y el sector industrial.
Recientemente se incorporó una secadora de madera, un sistema que emplea calor producido por una caldera, para el secado de la madera empleada en el taller de carpintería.
En lo que va del año, el Infona invirtió unos G. 700 millones en mejoras de infraestructura, entre ellas el secadero de madera. Tiene una sala de informática donde los estudiantes aprenden a realizar monitoreo ambiental y control de las condiciones de los bosques.