Cargando...
Los fiscalizadores Julio Marecos, Raúl Alonso y Claudio Velázquez de la Dirección de Monitoreo realizaron un procedimiento dentro del inmueble el jueves último. La propiedad está ubicada a 640 kilómetros al norte de Asunción, en el distrito Mariscal Estigarribia.
El Indi compró en 1996 el inmueble para el pueblo Guaraní Ñandéva, comunidad que cedió a favor de los ayoreos. Los fiscalizadores señalaron que al ingresar al lugar encontraron topadoras y personal haciendo trabajos de picada para lindero.
Marecos comentó que tenían conocimiento de que la propiedad era del Indi y que en el lugar estaban viviendo ayoreos, pero los topadoristas presentaron un documento a nombre de Julia Vargas.
“Constatamos que el Indi transfirió la propiedad de 25.000 hectáreas a esta persona, a simple vista ya es propiedad de ella”, dijo.
Ante esa situación intervinieron el inmueble porque debe tener licencia ambiental para hacer cualquier movimiento del suelo, desmonte u otro trabajo porque es alterar el estado natural del lugar, explicó.
Ahora esperan que la dueña presente en la Seam los documentos que tiene, dijo.
Los fiscalizadores señalaron que detrás de las ventas de propiedades en el Chaco hay muchas irregularidades, “un verdadero tráfico de tierras”. Venden reservas indígenas, como en este caso y también las propiedades de áreas protegidas, según indicaron.