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Con el paso del tiempo, los artesanos innovaron sus técnicas y presentan una variada gama de productos, como las planteras en distintas formas.AREGUÁ (María Teresa Blanco, corresponsal). El rubro de la alfarería es la primera fuente de ingresos económicos de unas 700 familias aregüeñas que se dedican al moldeado de la arcilla. En tanto, otras 1.000 viven de la comercialización de los diversos productos de cerámica en el microcentro y en otros negocios del país y el exterior.
Roque Maqueda (65) es uno de los artesanos más antiguos y tradicionales de esta localidad. Tiene dedicados 50 años de su vida netamente a la elaboración de planteras, ánforas y jarrones moldeados en torno. Comentó que introdujo mejoras a sus productos, como el esmaltado y los diseños modernos utilizados en la decoración de viviendas y restaurantes.
Otra de las antiguas artesanas dedicadas a la elaboración de unos 10 modelos de planteras es Iris Mirian Cáceres (66). Logró sacar adelante a sus hijos trabajando en la minifábrica de planteras donde brinda empleo a otras personas. La artesana indicó que actualmente la producción de plantera se realiza de manera directa, sin muchos intermediarios, gracias a la alta calidad de los trabajos.
En cuanto a las técnicas, expresó que utilizan el torno circular, torno boli y moldes de yeso.
La innovación y creatividad de los artesanos aregüeños los han llevado a evolucionar hacia la elaboración de planteras de concreto debido a su alta durabilidad y aceptación en el mercado nacional. En este rubro uno de los pioneros es Lucio Ojeda, quien con dedicación da vida a las planteras resistentes de cemento, arena y alambres. Además aplica pinturas tradicionales y de alta temperatura. En cuanto a los modelos, existen las lisas, torneadas con detalles, colgantes, de pared, las planas, copas, con moldes decorativos y las esculpidas.
Muchos de estos productos son expuestos sobre la Avda. La Candelaria de la capital de Central.
Roque Maqueda (65) es uno de los artesanos más antiguos y tradicionales de esta localidad. Tiene dedicados 50 años de su vida netamente a la elaboración de planteras, ánforas y jarrones moldeados en torno. Comentó que introdujo mejoras a sus productos, como el esmaltado y los diseños modernos utilizados en la decoración de viviendas y restaurantes.
Otra de las antiguas artesanas dedicadas a la elaboración de unos 10 modelos de planteras es Iris Mirian Cáceres (66). Logró sacar adelante a sus hijos trabajando en la minifábrica de planteras donde brinda empleo a otras personas. La artesana indicó que actualmente la producción de plantera se realiza de manera directa, sin muchos intermediarios, gracias a la alta calidad de los trabajos.
En cuanto a las técnicas, expresó que utilizan el torno circular, torno boli y moldes de yeso.
La innovación y creatividad de los artesanos aregüeños los han llevado a evolucionar hacia la elaboración de planteras de concreto debido a su alta durabilidad y aceptación en el mercado nacional. En este rubro uno de los pioneros es Lucio Ojeda, quien con dedicación da vida a las planteras resistentes de cemento, arena y alambres. Además aplica pinturas tradicionales y de alta temperatura. En cuanto a los modelos, existen las lisas, torneadas con detalles, colgantes, de pared, las planas, copas, con moldes decorativos y las esculpidas.
Muchos de estos productos son expuestos sobre la Avda. La Candelaria de la capital de Central.