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Juan Roa comentó que a causa de los golpes que recibió en su cabeza, el rostro y manos cuando empezaba a tomar fotografías en el comienzo del espectáculo tuvo que ser trasladado al hospital de Encarnación para recibir asistencia. Luego del diagnóstico médico presentó denuncia formal por la agresión.
Roa relató que al iniciarse el desfile de la primera comparsa se colocó en uno de los costados del sambódromo en posición de realizar las tomas fotográficas, momento en que uno de los custodios del evento, a quien se identificó como Alcides Giménez, le expresó que ese lugar no le correspondía y que debía cambiarse al otro costado de la calle. Aceptó y tomó sus elementos de trabajo para cumplir con el pedido del centinela, y que para no pasar en medio de las bailarinas se trasladó al otro sector por el frente del conjunto, instante en que Giménez y otros tres guardias se abalanzaron sobre él.
Agrega que los custodios lo empujaron hasta tirarlo al suelo y que luego le dieron golpes de puño en partes de su cabeza.
Según quejas, los guardias también actúan con agresividad contra el público con lo que demuestran nula preparación para cumplir tarea en un megaevento como el carnaval encarnaceno, que tiene un presupuesto millonario.
Movilización
Ayer periodistas de Itapúa se manifestaron en el sambódromo. Exigieron una explicación a los organizadores del corso por la prepotencia y crueldad con la que actuaron los miembros del equipo de seguridad.