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Ahora buscan despojarles de granos que fueron cultivados en forma ilegal dentro del predio mientras tuvo lugar la ocupación. Nucleados alrededor de una empresa denominada Agro Nikas SA, un equipo integrado por Luis Aníbal Schupp, María Magdalena Díaz Vda. de Dirks, Nivaldo Ourikes Kestring, Geovani Luiz Tonel, Michael Saenger y Alexis Benítez, busca complicidad judicial para lograr un nuevo atropello a los Eisen.
La abogada Victoriana Cáceres, titular del juzgado de primera instancia en lo civil y comercial de Ciudad del Este, otorgó a Agro Nikas SA “mejores derechos sobre granos en disputa”. Con este reconocimiento, la firma que cultivó en forma ilegal granos en propiedad ajena reclama la entrega de los mismos.
La jueza Victoriana Cáceres fue debidamente informada de que la soja se cultivó en forma ilegal, estando vigente una medida cautelar sobre la propiedad de los Eisen. La violación de una medida judicial no puede generar derechos. Con esta disposición la jueza de primera instancia deja de lado todo el marco jurídico de nuestro país para beneficiar a una de las partes.
La abierta complicidad se observa al considerar que Agro Nikas SA no peticionó en el expediente su reconocimiento de tercero con mejor derecho, solo pidió el levantamiento de medidas cautelares buscando recuperar la posesión del inmueble del cual fue desalojada.
La magistrada no puede conceder una medida que no fue solicitada y peor aún, una vez que lo hizo no notificó a la familia Eisen lo que estaba resolviendo; la jueza puede ser responsable del delito de prevaricato.
La disposición de la magistrada Victoriana Cáceres no tiene valor jurídico al otorgar un reconocimiento no solicitado por Agro Nikas. Para colmo de males, dispone la entrega de granos a esta empresa, a pesar de ser cultivados en violación a una medida judicial.
En este momento, el tribunal de apelación de Ciudad del Este estudia una apelación planteada contra la decisión de la jueza de primera instancia. La cámara está presidida por el abogado Sixto Melgarejo.
Difícil de creer que la jueza Victoriana Cáceres haya tomado la decisión de violar el Código Procesal Civil por simple ignorancia o simpatía con gente relacionada a la firma Agro Nikas; se puede pensar en la posibilidad de corrupción.
¿Y el camarista Sixto Melgarejo? El tribunal de apelación tiene la oportunidad de imponer el derecho, caso contrario se sumará a quienes buscan seguir con el despojo a la familia Eisen. Un cómplice más en la lista de arbitrariedades de las cuales son víctimas hasta hoy los Eisen.
roque@abc.com.py