Fiscalía sigue sin imputar a la jueza Máxima Meza

El Ministerio Público se muestra tolerante en extremo con la jueza Máxima Meza, de Ciudad del Este. A pesar de fuertes indicios, no es imputada por el supuesto delito de prevaricato. Máxima Meza está procesada por el Jurado de Magistrados. La fiscalía, en cambio, sigue sin mover un dedo.

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Máxima Meza de Maldonado ocupa la función de jueza de primera instancia en lo civil, en Ciudad del Este.

En marzo de 2015, la abogada Teresa Flecha presentó ante el Ministerio Público una denuncia de prevaricato contra Máxima Meza.

En forma paralela planteó ante el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados una acción similar por supuesto prevaricato.

El Jurado de Magistrados investigó a la jueza y luego tomó la decisión de procesarla por supuesto mal desempeño de funciones.

Ante el cúmulo de indicios en su contra, los miembros del Jurado de Magistrados resolvieron el 7 de junio pasado “declarar la cuestión de puro derecho y llamar a autos para sentencia”.

El jurado está dispuesto a dictar sentencia sobre la denuncia y considera que no es necesario llamarla a nueva declaración sino directamente dictar el fallo.

Inacción de la fiscalía

La fiscalía de Ciudad del Este, mientras tanto, se limita a observar el proceso a pesar de los fuertes indicios que existen en contra de Máxima Meza de Maldonado.

Esta jueza está relacionada con el fraude montado por Enrique Sarubbi, quien demandó a su suegro, Francisco Feliciano Duarte, 14 años después de muerto.

Enrique Sarubbi presentó ante el juzgado de Máxima Meza una acción de interdicto y solicitó la posesión de la finca 531 de Minga Guazú, propiedad de la firma HB Inmobiliaria SA.

Enrique Sarubbi tenía un título de propiedad judicial sobre la finca 483, luego de la demanda que “ganó” a su suegro muerto.

En menos de 24 horas, Máxima Meza ordenó el desalojo de HB Inmobiliaria SA, la entrega del inmueble a Enrique Sarubbi y ordenó que la empresa ejerza su defensa una semana después del desalojo.

Sigue sin ser imputada

El fiscal de Ciudad del Este, Carlos Almada dio un ejemplo de mediocridad al no imputar a la jueza. A pesar de los elementos a favor, optó por no hacerlo.

Fue tan vergonzosa su actuación que su mismo jefe, el fiscal adjunto Alejo Vera, se vio obligado a emplazarlo para iniciar la acción; a pesar de ello, tampoco lo hizo.

El fiscal adjunto Alejo Vera ya recibió tres urgimientos reclamando la imputación de la jueza pero el silencio sigue siendo la respuesta...

roque@abc.com.py

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