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Se pudo ver familias enteras disfrutando de las comidas y, sobre todo, apoyando la iniciativa impulsada por el Rotary Club.
El resultado de lo recaudado se conocerá recién en los próximos días, cuando finalice el conteo de los aportes recaudados por cada stand en la venta de comidas y postres, a los que se sumarán las donaciones directas realizadas por empresas comerciales.
Todo lo recaudado en esta edición, que es realizada en forma consecutiva desde hace 22 años, será destinado al servicio de neonatología del Hospital Regional, el Hogar Piche Róga, el Centro de Atención al Discapacitado, de Encarnación (Cenade) y la Fundación Sagrado Corazón.
“La meta que nos propusimos para este año es de G. 200 millones, que serán distribuidos a diferentes instituciones que ayudan a los demás”, indicó César Rojas, coordinador general de la comilona.
Comidas de diversos tipos y culturas, postres, ensaladas de frutas, entre muchas otras delicias se pudieron encontrar en la feria. Instituciones públicas y privadas se sumaron a la entusiasta jornada que se vivió desde temprano hasta pasado el mediodía.