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3 DE MAYO, Caazapá (Antonio Caballero, corresponsal). La escuela San Roque se hizo conocida luego de la publicación de una foto en la que se observa al docente Juan Carlos Chaparro encender una fogata en medio del salón para calentar el ambiente e impartir clases a los alumnos del quinto grado, en un día de intenso frío en la zona.
El local está a unos 15 km de la zona urbana de este distrito caazapeño.
Uno de los salones utilizado fue apuntalado con tirantes de madera debido a que las paredes se están resquebrajando. Pero si hay pronóstico de lluvia o temporal directamente los alumnos ya no acuden a la escuela por precaución.
La directora de la institución, Nidia Rossana Kroug Cabañas, dijo que las necesidades son muchas pero que el principal problema es la situación del salón del sexto grado.
Señaló que hace unos 15 días tomó la administración de la escuela y que con la publicación de la fotografía de los alumnos del quinto grado dando clases alrededor de una fogata, consiguieron llamar la atención de las autoridades educativas.
El profesor Chaparro estaba preparando una lección de comunicaciones cuando le sorprendimos en su aula.
Este docente refirió que a simple vista se observan las precariedades en las que se desenvuelven. Incluso “trabajamos con un pizarrón totalmente deteriorado, que ubicamos sobre dos viejas sillas”, indicó.
Relató que los alumnos del turno tarde pidieron hacer el fuego porque hacía demasiado frío en esa tarde y la directora autorizó.
La directora Kroug comentó que dicha aula inconclusa fue hecha por el Ministerio de Educción, pero no sabe el motivo del abandono de la obra.
Al salón para el preescolar le hacen falta instalación eléctrica, aberturas, ventanas y puertas. Tampoco cuentan con baños modernos porque los sanitarios construidos por el MEC no fueron terminados. Siguen utilizando la antigua letrina.
Acerca de la publicación de la fogata señaló que tuvo su efecto positivo porque están recibiendo ayuda, textos escolares, botiquín y otros. “Tenemos información de que vamos a recibir los materiales para el salón inconcluso. Hasta el Juzgado de la Niñez y la Adolescencia de Yuty se puso en comunicación con nosotros”, culminó.