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LIMPIO (Juan Jara, corresponsal). Los trabajos de ampliación del tramo de unos 10 kilómetros, entre esta ciudad y Mariano Roque Alonso, en principio tendría un retraso de dos meses. En ese lapso se debe modificar el proyecto a raíz de los errores, según fuentes del Ministerio de Obras Públicas (MOPC).
De acuerdo a los datos, entre los aspectos no previstos en el proyecto están afluentes de los arroyos Damián e Itay. La falta de previsión del encauzamiento de las aguas afectaría a algunos asentamientos urbanos cercanos con inundaciones. Considerando esa posibilidad, el MOPC decidió realizar modificaciones en el proyecto.
El ensanchamiento de la Ruta III debió comenzar en enero pasado y culminar en unos 26 meses. Sin embargo, aún no hay movimiento de máquinas en el trayecto, y solo fueron colocados algunos carteles.
El mismo que disenó la autopista Ñu Guasu
El diseño de la obra estuvo a cargo del consorcio Oting, del ingeniero Julio Álvarez, quien también tuvo a su cargo la interminable autopista “Ñu Guasu”, obra que el titular del MOPC, Ramón Jiménez Gaona, calificó como la “peor herencia” de los gobiernos de Fernando Lugo y Federico Franco.
Según la licitación pública internacional Nº 13/2014, la construcción fue adjudicada al Consorcio D-R (CDD Construcciones SA-Benito Roggio e Hijos SA) por G. 182.993 millones. El valor por kilómetro será de unos G. 17.102 millones, que la convierte en una de las obras más caras del país, por lo que se le puso el mote de “ruta de oro”.
Intentamos hablar al respecto con el jefe de la Unidad Ejecutora de Proyectos del MOPC, Ing. René Peralbo, pero no atendió nuestras llamadas a su celular.