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YPACARAÍ (Patricia Meza, corresponsal). En su casa del barrio San Blas, don Gil Ramón Medina Vázquez nos cuenta anécdotas de la contienda entre Paraguay y Bolivia, que duró tres años. A pesar de su longevidad mantiene una impresionante lucidez.
Relató que cuando se enteró de que el Paraguay estaba en una guerra se presentó a la milicia de forma voluntaria. Cumplió el papel de intendente en la Subdirección de Comunicaciones durante la contienda y su base estuvo en la actual Mariscal Estigarribia.
Mencionó que los bolivianos estaban bien armados y muy preparados, mientras que los paraguayos ni siquiera sabían manejar un arma.
En esa época se llevaba a agricultores, estudiantes, jóvenes para pelear. “Al principio se respetó a la gente que estudiaba, pero cuando íbamos perdiendo también se les llevó”, mencionó.
De Ypacaraí habrán ido como 500 personas, especialmente jóvenes, refirió.
El principal problema fue la falta de agua, que era transportada en camiones, pero era difícil abastecer a todos los soldados, rememoró el veterano.
Don Medina dijo que el principal motivo de la guerra fue que los norteamericanos deseaban poseer un presunto yacimiento de petróleo en el Chaco paraguayo y aseguró que los bolivianos fueron utilizados.
Aclaró que él no combatió, pero señaló que vio a sus hermanos y muchos amigos pelear en defensa del Chaco paraguayo.
Dijo que estuvieron a punto de ser llevados para pelear cuando los bolivianos pidieron la paz. “Empezaron a entrenarnos para usar el arma”, dijo.
Resaltó la inteligencia del estratega Mcal. José Félix Estigarribia, uno de los que dirigió la contienda.
Sabía dónde iban a atacar los bolivianos, indicó.
“Los bolivianos vinieron a caer en una tenaza, en la boca de la serpiente, eran 10.000 soldados”, refirió al hablar de la batalla de Campo Grande.
Mencionó que el Mariscal Estigarribia no comentaba nada de lo que estaba preparando y ubicó cuatro fortines dentro de lo que se conocía como Campos Vía. “Dejó que todos los bolivianos ingresen y después empezaron a tirar bombas los paraguayos, 10.000 soldados fueron prisioneros y pidieron la paz”, concluyó.