La empresa Chaco Cuero SRL fabrica monturas de caballo exclusivamente para la exportación, desde hace más de una década, con basto (aparejo o albarda de caballerías de carga) del tipo "Western" (Clasic, Top y Gol) y sin basto de la línea "Startrekker". Todo es para la exportación, y las ventas a nivel local, solo excepcionalmente y más bien de artículos de segunda. El costo es de entre 500 a 1.000 dólares, según el modelo. "No podemos vender mucho a nivel local, porque la demanda exterior es grande y la exigencia de calidad muy alta", explicó Rainer Neufeld, gerente de la empresa.
Mensualmente exportan 400 monturas, unas 4.000 por año, con un movimiento de ingreso de varios millones de dólares. La mitad de la producción va rumbo a Estados Unidos y Canadá, y la otra a Alemania, de donde es redistribuida para Austria, Escandinavia e Italia. Un cliente compra entre 50 a 200 monturas.
Para las monturas tipo "Clasic", el cuero se consigue en el mercado local y es preparado en una curtiembre propia; para algunos modelos se debe importar el cuero de Argentina o Estados Unidos, donde se trabaja más con razas como Santa Gertrudis y Gelbvieh, que dan cueros mas gruesos. Mientras el cuero chaqueño, que es muy fino, proviene en gran parte de las razas Brahman o Nelore.
La empresa emplea en total a 90 personas, la mayoría (83) trabaja en la talabartería y son criollas; también hay algunos brasileños, un indígena y un suizo, y en la parte administrativa todos son menonitas. Cada empleado tiene su tarea específica, que comienza con cubrir los aperos y después entra en la talabartería, donde sigue el proceso de forrar el pico, hacer lambrera de asiento, guardabarros, estribos, hasta que se completa la montura. Las argollitas y otros componentes de plata como también la lana sintética se importa. Cuando se empieza con un nuevo modelo, se traen todos los componentes de Alemania y después se busca o deja hacer algo similar en el mercado local o en los países vecinos.
Fabricar monturas de caballo para la exportación es un negocio que encaja perfectamente en la economía nacional. Este rubro precisa de materia prima que viene directamente del campo y promociona toda una cadena de generación de empleo, desde la cría de los animales, su faenamiento correcto, fabricación misma de las monturas hasta su exportación. Tiende a reemplazar la marcación tradicional por caravanas, que también significaría todo un beneficio para la ganadería nacional.