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Los ediles manifestaron que aparentemente el jefe comunal estaría molesto por el duro revés político que sufrió con el retorno de los concejales a los que considera sus adversarios, por lo que preferiría esconderse algunos días para evitar encontrase con ellos. Dicen además que ni su teléfono celular atiende.
Los concejales Blas Vera, Camilo Maidana, Elena Martínez, Zulma Graciela Teixeira del (PLRA) y Rosana González (ANR) fueron repuestos en sus cargos el pasado lunes 9 de marzo con la presencia de dos representantes de la Justicia Electoral de San Pedro.
En la ocasión, el grupo de los cinco citados eligió a Graciela Teixeira como presidenta de la Junta Municipal y a la colorada Rosana González como vicepresidenta, conformando de esta forma una nueva mayoría en el legislativo.
Treparon una muralla
El día sábado último se realizó la primera sesión ordinaria de esta Junta Municipal, donde los mencionados miembros tuvieron que trepar la muralla con el uso de una escalera para poder pasar al predio de la institución municipal para asistir a la reunión convocada, debido a que el portón de acceso estaba con resguardo policial impidiéndoles la entrada.
Cuando se les consultó a los efectivos de la policía de quién provino la orden para atajar a los concejales, mencionaron que fue mediante una orden superior de la jefatura departamental a pedido del intendente.
La presidenta del órgano legislativo, Graciela Teixeira, expresó que con esta actitud el ejecutivo está demostrando el poco interés en transparentar su administración, que de acuerdo a algunos datos habría un sinfín de irregularidades durante el período de gobierno, con la complicidad de los ediles que estaban apañando su gestión.
Una vez más, intentamos contactar con el jefe comunal para conocer el motivo de su silencio y de no mostrarse a la gente, pero como ya es de costumbre nuestra llamada no fue respondida.