Dos empresas se disputan la administración de una aguatera

Dos empresas se disputan la administración del servicio de la aguatera “Agua del Sur”, ubicada en el barrio Santa Librada y San Carlos de Ñemby. Ambas firmas envían facturas a los usuarios, que no saben a cual de ellas abonar lo que corresponde por el suministro. Ante el caos, piden que la aguatera sea intervenida.

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ÑEMBY (Higinio R. Ruiz Díaz, corresponsal). La aguatera Agua del Sur está en disputa por María Antonia Campuzano de Meza y la empresa Jarisman SA, propiedad de los hermanos Roberto y Juana Jara. Ambas partes en conflicto aseguran ser los legítimos administradores del servicio y envían las facturas a los usuarios.

Los afectados por la caótica situación presentada comentaron que si le pagan a María Antonia Campuzano de Meza, los Jara proceden a cortar el suministro o viceversa. Viven en una angustiante confusión y temen que se queden sin el vital líquido a raíz del problema existente, expresaron.

Jorge Antonio Yeza, usuario, comentó que el dueño original del servicio es la familia Meza. Añadió que este año apareció la empresa Jarisman para cobrar por el servicio y todo se realizaba con normalidad hasta que hace unos tres meses Agua del Sur empezó también a enviar facturas reclamando el cobro.

“Hace tres meses que vivimos esta situación y no sabemos a quién pagar porque recibimos dos facturas. Si le pagamos a una, la otra viene y corta. La verdad desconocemos quién es el verdadero dueño del servicio”, expresó Yeza.

Por su parte, María Rosa Mieres, abogada de la familia Meza, acusó a los hermanos Jara de estafadores y querer apropiarse de la aguatera en forma fraudulenta. Aseguró que la propiedad corresponde a María Antonia Campuzano de Meza.

“La señora Campuzano de Meza fue engañada en su buena fe por los hermanos Roberto y Juana Jara, que le propusieron firmar una sociedad y así otorgar un préstamo de tres millones de guaraníes. Sin embargo, le hicieron firmar un documento en donde decía que ella cedía la aguatera”, expresó la abogada.

Agregó que la aguatera es propiedad de Campuzano de Meza desde el año 1996 y que el caso se está dirimiendo en los estrados judiciales. Aseguró que los usuarios deben pagar a la empresa Agua del Sur y no a Jarisman.

Llamamos en varias ocasiones al teléfono de Juana Jara para escuchar su versión, pero no atendió. Tampoco contestó nuestros mensajes de texto.

Los usuarios piden la intervención de las instituciones competentes para resolver el problema.

Erssan debe intervenir

El Ente Regulador de Servicios Sanitarios (Erssan) debe intervenir en caso de denuncias contra aguateras. Sin embargo, la función de la entidad se limita a elaborar diagnósticos sobre las empresas que suministran el vital líquido, pero las decisiones quedan a cargo del Poder Ejecutivo, que debe ejecutar las acciones para resolver los problemas de servicio sanitario.

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