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La misma consistió en un rosario grande, otro chico, dos aros grandes y tres anillos que en total llegan a los 100 gramos de oro.
Según los antecedentes, las joyas de la Virgen fueron robadas en el mes de junio del presente año de la casa de la benefactora, quien asegura que no tiene nada que ver con el hurto.
Pese a que ya se repusieron las joyas con este donativo, el cura párroco local, presbítero Alejo Robadín, exige que siga la investigación sobre el robo. Lamentó que no haya un solo abogado que quiera encargarse del caso, posiblemente porque la parroquia y la diócesis no tienen dinero para pagar los gastos que demandan los trámites jurídicos.
Agregó que el gesto de la señora Ferreira debe ser valorado y que no tiene nada que ver con el robo señalado, que el pueblo aparentemente sabe quién o quiénes son los autores, pero hasta el momento no existen pruebas que les incriminen y faciliten la investigación.
Según los antecedentes, las joyas de la Virgen fueron robadas en el mes de junio del presente año de la casa de la benefactora, quien asegura que no tiene nada que ver con el hurto.
Pese a que ya se repusieron las joyas con este donativo, el cura párroco local, presbítero Alejo Robadín, exige que siga la investigación sobre el robo. Lamentó que no haya un solo abogado que quiera encargarse del caso, posiblemente porque la parroquia y la diócesis no tienen dinero para pagar los gastos que demandan los trámites jurídicos.
Agregó que el gesto de la señora Ferreira debe ser valorado y que no tiene nada que ver con el robo señalado, que el pueblo aparentemente sabe quién o quiénes son los autores, pero hasta el momento no existen pruebas que les incriminen y faciliten la investigación.