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El caso Eisen refleja la fragilidad y la podredumbre que imperan en el Poder Judicial: jueces y agentes del Ministerio Público gozan de absoluta impunidad para violar las leyes en función a intereses particulares.
La familia Eisen es propietaria de una finca de 1742 hectáreas en el distrito de Mayor Otaño, Itapúa.
El 25 de julio de 2014 los Eisen fueron desalojados del inmueble, se nombro depositaria de la finca a María Magdalena Vda. de Dirks quien no era parte en el juicio de interdicto y las llaves se entregaron a Luis Aníbal Schupp.
El 14 de octubre de 2014, el juzgado de primera instancia de Encarnación dictó la sentencia Nº 1.934 ordenando el desalojo de María Magdalena Vda. de Dirks y la restitución a los Eisen.
María Magdalena Vda. de Dirks actuó en complicidad con su hija María Raquel para montar un contrato fraudulento de arrendamiento de tierras en favor de la firma Agro Nikas SA.
Con este documento en la mano, María Magdalena Vda. de Dirks introdujo a Agro Nikas SA en la tierra de los Eisen.
El mandato judicial designa a María Magdalena Vda. de Dirks depositaria del inmueble y no dice una sola palabra de Agro Nikas.
Ni la viuda ni la firma son parte en la acción de interdicto, pero quedaron con la posesión de tierra ajena.
Los Eisen, legítimos propietarios, con todos los documentos en regla, fueron desalojados y no pueden recuperar su tierra hasta hoy día.
“Directores” de Agro Nikas
Alexis Benítez Rodríguez y Ever Zelaya Ramírez figuran en los papeles como directores de Agro Nikas SA; de acuerdo a información recopilada en Mayor Otaño, Benítez Rodríguez es el firmante de poderes en nombre de la empresa.
Con referencia a Agro Nikas, el 28 de julio de 2015, la Abogacía del Tesoro del Ministerio de Hacienda confirmo lo siguiente: “No habiendo en tanto la citada sociedad cumplido con el requisito exigido por las normas legales, este departamento no cuenta con un archivo de sus movimientos, por lo que en estas condiciones no contamos con datos relativos a la misma” (negritas son nuestras).
Agro Nikas no existe, es una empresa fantasma: la Abogacía del Tesoro confirma que no tiene datos relacionadas a la misma.
Alexis Benítez Rodríguez y Ever Zelaya Ramírez están usurpando funciones y atribuciones que no les corresponde. No pueden andar firmando poderes en representación de una sociedad anónima de la cual el Ministerio de Hacienda no tiene antecedentes.
Tanto Alexis Benítez Rodríguez como Ever Zelaya Ramírez deben ser imputados por el Ministerio Público.
Ambas personas gozan de la confianza de Nivaldo Ouriques Kestring, quien busca utilizar el nombre de Agro Nikas para volver a cultivar soja en tierra ajena sin pagar arrendamiento tal como hizo el año pasado.
Todo esto ocurre en las narices del fiscal de Mayor Otaño: Ricardo Maldonado Ramírez no tiene ningún interés en cumplir su trabajo. Esta más preocupado en proteger a usurpadores.
roque@abc.com.py