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ALTO PARAGUAY (Especial).Auditores de la Contraloría General de la República realizaron una evaluación de gestión de la administración, periodo 2009, del exintendente de Carmelo Peralta y actual concejal departamental por este departamento, Saturnino Bogado Quintana (PLRA).
El informe del ente contralor resalta graves falencias administrativas, resultado de un nulo sistema de control.
La implementación de mecanismos administrativo - contables adecuados era responsabilidad del entonces intendente municipal, sostiene la conclusión de los auditores.
Resaltaron en el informe final una serie de recomendaciones que no fueron tomadas en cuenta por el ejecutivo municipal, así como de resoluciones y leyes que fueron violadas.
Imputación
El pasado 22 de octubre el Ministerio Público dictó el acta de imputación Nº 104 ante la sospecha de lesión de confianza por parte del exintendente Bogado Quintana, así como del exconcejal municipal Wilfrido Antonio Segovia Samudio (ANR).
La agente fiscal Liz Marie Recalde Velázquez, responsable de la unidad fiscal número 1, con sede en la ciudad de Concepción, considera que ambos políticos deben ser objeto de investigación penal ante la posibilidad de que hayan robado siendo autoridades del Municipio de Carmelo Peralta.
En coincidencia con el informe de la Contraloría General, la fiscala Recalde Velázquez menciona en el acta de imputación el uso discrecional de cheques sin que se tengan documentos de aval del uso correcto del dinero comunal.
El acta de imputación menciona que “existen suficientes elementos de convicción acerca de la existencia del hecho punible de lesión de confianza”.
Bogado Quintana ejerció el cargo de intendente desde 18 de febrero de 2009 hasta el 5 de agosto de 2010, mientras que Segovia Samudio se desempeñó como ejecutivo comunal desde el 5 de agosto a 20 de diciembre de 2010.
Comunidad pobre
La comunidad de Carmelo Peralta se encuentra a orillas del río Paraguay, frente a la ciudad brasileña de Puerto Murtiño. Es una localidad empobrecida por la corrupción, cuyos habitantes viven en el aislamiento que caracteriza al departamento por falta de caminos y malos administradores.