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Eran contratadas de la empresa Sevima SA, que tiene un contrato de unos G. 90.000 millones con el IPS. Sin embargo –según la denuncia–, la firma paga menos del salario mínimo a 85 trabajadoras de limpieza.
El reclamo refiere que las limpiadoras que estaban juntando firmas para solicitar una tripartita con la empresa ante el Ministerio de Trabajo fueron despedidas mediante un mensaje de texto por la patronal.
Las trabajadoras junto con su abogado José Félix Estigarribia solicitaron ayer en la oficina del Ministerio de Trabajo una revisión de su situación laboral, reajuste salarial y del aguinaldo 2018.