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AREGUÁ (Gladys Villalba Jara, corresponsal). La refacción del local de la escuela Tajy Poty de la compañía Caacupemí estuvo a cargo de la empresa unipersonal Román Ibars Construcciones. El contrato por G. 321 millones entre la firma y la Comuna fue firmado el 26 de noviembre de 2016.
El concejal Roland Fernández (FG) exigió en reiteradas ocasiones, a través de la Junta Municipal, que la Intendencia presente un informe detallado sobre las obras realizadas en la escuela. Según el edil, la institución fue declarada en “emergencia educacional” por el Comité de Educación de la Municipalidad sin que exista un verdadero peligro de derrumbe.
“La escuela tenía y tiene necesidades, pero jamás podría costar G. 321 millones las mejoras que se hicieron en el lugar. Apenas tenemos siete aulas y el trabajo hecho no puede tener ese costo”, indicó.
El jefe comunal Denis Torres, junto a la directora de Unidad Operativa de Contrataciones, OUC, Laura Cabrera, la administradora general Clara Villamayor y el director de Obras Carlos Torres, manifestaron que se procedió de acuerdo a lo que estipula la Ley N° 2051 de Contrataciones Públicas, en su artículo 33. Aseguraron que la normativa le faculta a la Intendencia realizar contrataciones sin llamado a licitación pública o por concurso en caso de emergencia o derrumbe e incluso puede llevar a cabo varias obras sin presentar los proyectos a la Junta Municipal.
Fernández denuncia porque “quiere mostrarse” ante los periodistas que asisten a la sesión y por eso cuestiona y pide informes, indicaron Torres y Villamayor.
En una larga lista anexada al contrato sobre las mejoras realizadas en la escuela resalta que las de mayor se encuentran la demolición del techo en su totalidad (G. 15 millones), colocación de viga de galería G. 16 millones), colocación de tejas nuevas G. 124 millones, construcción de contrapiso G. 10 millones, piso baldosa calcárea G. 33 millones, pintura del techo G. 14 millones, pintura de la pared interna y externa G. 17 millones), colocación de artefactos sanitarios G. 4.600.000 (dos mingitorios), instalación eléctrica de aulas y baño G. 25 millones.
Critican calidad de obras
La escuela Tajy Poty tiene siete salones en total, incluyendo la dirección, la biblioteca y la cantina. Tiene 228 alumnos inscriptos en ambos turnos. Algunos docentes cuestionaron que deban compartir sanitarios con los alumnos, así como la instalación de un ventilador que funciona con un enchufe en el sanitario y que peligra a los alumnos, ya que está al alcance de ellos. En el sanitario solo cambiaron los azulejos y colocaron los mingitorios. Al término de los trabajos realizados en el lugar, quedaron en el predio de la escuela todos los escombros, que también representan un riesgo para los niños que tienden a jugar en el sitio.