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Por otro lado, el oficial primero Jorge Saldívar, subjefe de la Comisaría 8ª de la Colonia Neuland, refirió que se reunió con el líder comunitario Francisco Martínez y su comisión de seguridad para acordar un control interno más estricto. Las personas que generen disturbios serán llevados a la comisaría para ser puestos inmediatamente a disposición de la fiscalía y jueces, indicó.
Se maneja la existencia de dos grupos que operan en la comunidad, no tienen propósito fijo, sino son jóvenes que se agrupan e ingieren bebidas alcohólicas. Muchos de ellos ya fueron identificados, dijo Saldívar.
El comisario Moudelle afirmó que ya no permitirán que los indígenas ingieran bebidas alcohólicas frente a las despensas en la vía pública, frente a la comunidad y que si la situación llega a extremos, agentes de la comisaría local, con apoyo de otras comisarías aledañas, intervendrán.
El conflicto comenzó hace tres años. Existe falta de interés de los líderes para resolverlo y invocan el derecho consuetudinario, hecho que le costó el cargo de líder a Carlos Céspedes.
El nuevo líder, Francisco Martínez, afirmó que quiere trabajar muy de cerca con la Policía Nacional para eliminar las grescas, pero en la comunidad de casi 2.000 personas cuentan con solo seis comisarios propios y cuando quieren derivar a la Policía Nacional los casos de personas involucradas en hechos delictivos, son perseguidos por los familiares para liberarlos.