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El 19 de julio de este año la empresa fue intervenida y los antecedentes fueron derivados a la Asesoría Jurídica de la institución para un sumario, pero hasta ahora la dependencia no se expidió, según el fiscalizador de la Seam, Francisco González.
“Nosotros intervenimos la curtiembre en julio pasado y evidenciamos que tenía una pequeña pileta de tratamiento de efluentes que estaba colmatada y, por ende, tiraba directo al arroyo y al río los desechos”, dijo González.
La Municipalidad procedió el lunes último a suspender las actividades y a clausurar el local. Sin embargo, el martes seguía operando “regularmente”, según confirmó el intendente, Raúl Mendoza (PLRA).
El representante de la firma, Hugo González, reconoció que operaban sin licencia y sin permiso municipal.