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FILADELFIA, Chaco (Marvin Duerksen, corresponsal). El lanzamiento del plan de manejo del yaguareté se llevó a cabo la semana pasada en esta ciudad. Durante el acto, la directora de Vida Silvestre de la Seam, Rocío Barreto, aseguró que trabajarán muy de cerca con todas las instituciones involucradas.
Por su lado, el intendente de esta localidad, Holger Bergen (PQ), exhortó hacer más planes similares para otras especies amenazadas.
La elaboración del plan llevó dos años y estuvo a cargo de un gran equipo técnico y considera la cacería furtiva como amenaza principal del yaguareté.
“La amenaza en campo es lo más importante, se produce por el conflicto con las propiedades ganaderas. El Chaco es la principal zona de distribución de la especie, es la principal fuente de matanza y de disminución de las poblaciones (del yaguareté). En el momento que se encuentra con el ganado es cuando el ganadero –muchas veces sin determinar cuál es el individuo que fue causante de la matanza de sus animales– mata ya indiscriminadamente todos los yaguareté que encuentra. Entonces este tipo de pensamiento queremos erradicar con la concienciación, que está prevista en este plan”, explicó por su lado María del Carmen Fleytas, del WCS.
Otras amenazas identificadas son la pérdida de hábitat; vulnerabilidad de las instituciones responsables para la protección; la investigación científica y educación ambiental insuficiente; políticas públicas incompatibles o que no protegen en forma efectiva al yaguareté y su hábitat; el cambio climático y la disminución de presas. Se estima que a nivel país podrían existir entre 300 a 500 ejemplares, la amplia mayoría, en el Chaco.
Para fomentar la conservación del yaguareté, el plan prevé una serie de acciones con instituciones públicas y privadas para proteger esta especie en su sitio de origen; fortalecer la investigación y el monitoreo; incidir en las políticas públicas a favor de técnicas de conservación y potenciar la población existente con miras a su reinserción en áreas de distribución histórica de la especie. No obstante, María Carmen de Fleytas admitió que no existe experiencia con reinserción del yaguareté en nuestro país. También se buscará fortalecer los cautiverios como zoológicos, bioparques, centros de rescate o de reproducción.
Territorio
Un yaguareté hembra recorre un territorio entre 3.800 hectáreas hasta 6.900 hectáreas en zona del Pantanal paraguayo y brasileño, mientras el animal masculino ocupa un terreno entre 6.700 hectáreas hasta 17.000 hectáreas, con una densidad de cuatro a siete animales por 10.000 hectáreas en esta zona. En la zona del Chaco paraguayo, el hábitat para un animal puede alcanzar hasta 42.000 hectáreas. En el Parque Defensores del Chaco se encontró una densidad de 0,7 animales por 10.000 hectáreas.
Debilidad
Hasta ahora, el financiamiento del proyecto se encuentra asegurado solamente por partes, y se espera que en los 10 años del plan de acción se pueda conseguir recursos a través de las organizaciones involucradas, como la Seam, la Itaipú Binacional, ONGs, Secretaría Nacional de Turismo (Senatur), Ministerio de Educación y Cultura (MEC) y universidades.