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Hace poco regresó de Taiwán donde, luego de realizar la licenciatura en Agricultura Tropical con énfasis en Producción Animal y Zootecnia entre los años 2007 y 2012, junto con Virgilio Ozuna, se quedó por dos años más para completar la Maestría en Inmunología y Producción de Vacunas para animales.
Sin embargo, la mayor dificultad es reinsertarse en la sociedad paraguaya e incorporarse al mercado laboral paraguayo. “Siempre quise salir del país para viajar al exterior y conocer el ritmo de vida, la cultura y la tecnología de los taiwaneses. Fue chocante, especialmente por el idioma, pero de hecho me adapté bastante bien y ahora quiero aportar los conocimientos que traje a mi país”, comenta.
Explica que Taiwán, por tratarse de un pequeño país, con un espacio territorial muy reducido, existe una tecnología e infraestructura muy avanzada, de tal manera que pueden criar en una hectárea cien vacas y aprovechar en producción de leche, por ejemplo.
“Quiero trabajar en un laboratorio, que es mi especialidad. De hecho, quisiera seguir investigando en el área de producción de vacunas para animales, pero hasta ahora lastimosamente no he encontrado nada hasta el momento, ni en Ciudad del Este ni en Asunción”, comenta.
No obstante, la joven profesional recibida en Taiwán, asegura que cuentan con todo el apoyo de la Embajada de la República de China que se preocupa bastante para la reinserción.
Sin embargo, hace falta una política, un apoyo del Gobierno paraguayo y las autoridades nacionales. Por ahora la esperanza radica en la Asociación de Estudiantes Paraguayos en Taiwán con quienes están viendo la posibilidad de crear una bolsa de trabajo para que las personas, al regresar aquí, tengan espacios listos para trabajar. “Es muy difícil conseguir trabajo una vez que uno regresa. Yo vivo en Ciudad del Este y quiero trabajar, aquí en Paraguay, en cualquier punto. Caso contrario, debo pensar en salir de nuevo al extranjero, y eso no me gustaría hacer”.