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Incluso llegaron hasta el lado norte del Defensores del Chaco, y dos de sus integrantes se enfermaron y ellos los abandonaron en el monte, vivos.
En toda esta zona, un lugar sagrado en la historia ancestral del mundo ayoreo, ellos no encontraron rastros de otros grupos silvícolas, según nuestras fuentes.
Se presume que en el monte chaqueño deambularían ayoreos separados por diferentes razones de sus clanes, pero no se tiene información ni contacto con ellos.
El actual grupo de totobiegosode de Chaidí conoce casi con exactitud el grupo silvícola que sobrevive todavía al norte del departamento de Boquerón, en la zona denominada "Amotocodie". El lugar se encuentra a unos 160-180 kilómetros al norte de Filadelfia. Ahí estarían nueve ayoreos adultos, tanto totobiegosode como guidaigosode.
Hay tres hombres: Jonoine Etacori, Ijiroi Etacori y Putugútoroi Picanerai, este último hermano de Jóro Picanere del actual grupo de silvícolas de Chaidi. Los nombres de las mujeres son: Uó Posijñoro (es la madre de Joro Picanere y Putugútaroi Picanerai), Aregué Posijñoro Dajuegué y Edabía Posijñoro, esta última hermana de Ebi Posorájñai que vive en Campo Loro. Los nombres de dos adultos y los niños se desconocen.
Para este último grupo se ha formado una iniciativa liderada por el suizo Benno Glausser, quien obtuvo el año pasado fondos importantes para la compra de tierra.
Glausser trabaja además en la concientización de los estancieros en el cinturón alrededor de Amotocodie, porque cree que en algún momento dado también a este grupo le tocará dejar el monte, pero esta decisión deberá ser voluntaria y sobre todo sin derramamiento de sangre.
UN CAPÍTULO QUE SE VA
Con este último grupo que sobrevivía todavía en la selva chaqueña se está cerrando el cerco a los hijos naturales del Chaco, quienes desde la implementación de la ganadería en el Chaco estuvieron enfrentados a una lucha desigual, el modelo de producción agropecuaria y su vida ancestral. El constante y despiadado avance de la frontera ganadera no les ha dejado alternativas válidas para una sobrevivencia a largo plazo, sobre todo cuando las picadas del hombre blanco pasaron inescrupulosamente y a sabiendas por sus toldos, como ocurrió en el 2002 en San Antonio, con el actual grupo de Chaidí.
La agresión de un modelo de desarrollo, que solo permite y admite las reglas propias, fue exaltada también durante la expo Rodeo Trébol 1998, cuando después de la aparición de una familia silvícola (de Porajai Picanerei) y las repercusiones a nivel nacional e internacional, un dirigente del Chaco central dijo en su discurso que no se puede frenar el desarrollo del Chaco por solo un pequeño grupo de ayoreos silvícolas.
GRUPO SILVÍCOLA DE AMOTOCODIE
Hombres:
Jonoine Etacóri
Ijiroi Etacori,
Putugútóroi Picanerai (hermano de Jóro Picanere del actual grupo de silvicolas de Chaidí).
Mujeres:
Uó Posijñoro (es la madre de Jóro Picanere y Putugútóroi Picanerai),
Aregué Posijñoro,
Dajuegué
Edabía Posijñoro (hermana de Ebi Posorájñai).
CHAIDI
- Significa el lugar donde siempre estuvimos (los totobiegosode).
- El GAT estaba preparando allí un futuro asentamiento para familias totobiegosode.
- Se limpió un lugar para hacer tajamar.
- Está previsto la construcción de 15 - 20 techos para casas familiares.
- El antropólogo Amadeo Benz participó de una mensura judicial y los silvícolas comentan que desde hace rato lo vienen observando, sin hacerle daño alguno.
- Chaidí queda unos 70 Kms. de Campo Loro.
- Arocojnadi ya es un asentamiento totobiegosode en tierras aseguradas.
- Chaidí quedaría unos 25 - 30 Kms. de esta comunidad.
- En 1998 dejó el bosque la familia de Parojai Picanerei, que vivió durante décadas, sola, en la selva chaqueña.
- En 1986 un grupo de ayoreos misioneros de Campo Loro ubicó al grupo de totobiegosode y al contactar con ellos fue atacado y fallecieron 5 personas.
- Una parte de este grupo se fue a Campo Loro, el otro no lo aceptó y quedó en el monte y son los mismos que ahora se identificaron en Chaidí.