Asaron más de 4.000 kilos de carnes en el “Festival de la Costilla” en Naranjal

Toda la carne asada fue vendida ayer en la 12ª edición del “Festival de la Costilla” del distrito de Naranjal, ubicado en el sur del departamento de Alto Paraná. Miles de personas provenientes de distintas zonas e incluso del Brasil disfrutaron del evento. La recaudación será invertida en instituciones públicas.

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NARANJAL, Alto Paraná (De nuestra redacción regional).Al menos cuarenta pobladores, algunos de ellos “asaderos” (cocineros de las carnes) y otros que proveen las leñas y las mantienen encendidas, se encargan cada año de la cocción de los costillares para el ya tradicional festival en este municipio.

Ayer fueron asados 145 costillares de vacunos de entre 25 y 30 kilos cada uno, es decir, más de 4.000 kilos de carnes. Cada costillar es para alimentar a entre 25 y 30 personas.

El encargado de la cocción desde hace doce años es Silvano Rosler, quien explicó que el proceso dura entre ocho y nueve horas.

“La carne fue condimentada el sábado y hoy (por ayer), a las 03:00 de la madrugada, ya estaba en el fuego para que a las 11:00 esté lista. El fuego se tiene que mantener a un metro de distancia y a una temperatura constante”, manifestó.

El intendente local, César Padoim, señaló que el objetivo del evento es hacer conocer la ciudad e integrar a sus habitantes, ya que el municipio es reconocido por su festival.

A diferencia de años anteriores, el mes del evento fue modificado, ya que en los once primeros años fue realizado en el mes de junio en coincidencia con la fecha de aniversario del distrito.

En días fríos hay pocos visitantes

“Debido a que en la edición anterior recibimos poca visita por el intenso frío y la lluvia que nos complicó, decidimos cambiar la fecha -del festival- para el verano. Ahora el clima es mejor y la gente puede disfrutar más tiempo del evento”, señaló el jefe comunal.

Igualmente, explicó que en la organización se involucran representantes de la Municipalidad, del centro de salud, de las escuelas y colegios, además de referentes de la parroquia, por lo que la recaudación obtenida con la venta del asado se deposita a una cuenta bancaria para solventar los gastos de dichas instituciones.

Una parte del dinero captado se destinará para costear la construcción de un local propio para el festival, pues para ello ya cuentan con un terreno de seis hectáreas, donado por un colono.

La cocción de la gran cantidad de carnes se realizó en el salón parroquial Santa Catalina, de la mencionada localidad.

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