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En esas condiciones, la comunidad educativa, con más de 200 niños, continúa sin el vital líquido.
Hace dos años ya habían planteado el problema de la falta de agua en la escuela. Se esperaba que con el pozo, recientemente construido, se tendría resuelto el problema, pero no podían usar por falta de la energía eléctrica para la operación de bombeo.
Por ahora los niños llevan sus propias botellas de agua para beber, pero la falta del vital líquido impide que se utilice un baño moderno sexado construido por la Gobernación de Itapúa. Se sigue utilizando una letrina.
Los vecinos habían denunciado que por cuestiones burocráticas la ANDE no les proveía de un medidor y la conexión de energía eléctrica. Tras los reclamos, el jefe regional de la entidad, Ing. Hugo Rolón, dispuso que se apuren los trámites, y el fin de semana último se instaló un medidor, pero el sistema sigue sin poder operar.
Todavía no se puede extraer el agua porque, aparentemente, está averiado el sistema de control de la bomba de agua. Se quemó una placa de la consola de control del sistema de bombeo.
El presidente de la Junta de Saneamiento dijo que solicitarán ayuda al intendente Víctor Casas (Independiente) y a voluntarios del Cuerpo de Paz que trabajan en la zona para equipar otro pozo del vecindario y que tendría caudal de agua para todo el barrio.