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EUSEBIO AYALA, Dpto. de Cordillera (Desiré Cabrera, de nuestra redacción regional).La misa en honor a San Roque se realizó en el templo parroquial a las 07:45 ante una gran cantidad de fieles. El acto protocolar de homenaje se llevó a cabo frente al monumento en honor a los niños mártires. En la ocasión, el intendente saliente Gerardo Rojas (ANR), quien renunció al cargo hace unos días, en su discurso advirtió a los jóvenes sobre las amenazas que se ciernen actualmente sobre la sociedad: la violencia, los extremismos, las situaciones de inestabilidad económica y política, que hacen que todo se torne más difícil.
En efecto, instó a ser protagonistas de un cambio radical en la sociedad, superando las adversidades. También recordó a las autoridades nacionales que la clase política tiene que organizarse en la medida de la persona misma y sus necesidades.
El desfile cívico, estudiantil y militar se inició a las 11:00 con jóvenes que viajaron desde varios puntos del país con la intención de rendir de esta forma su homenaje a los caídos en la cruel batalla. La parada se extendió hasta las 15:00 con el paso de los cadetes del Liceo Militar.
La batalla de Acosta Ñu es el símbolo más terrible de la crueldad de la Guerra contra la Triple Alianza (Brasil, Argentina y Uruguay), que se inició en el año 1865 y concluyó el 1 de marzo de 1870. Los Niños Mártires de Acosta Ñu, que se vistieron en pequeños hombres para librar una lucha desigual contra los soldados del ejército aliado, dieron ejemplo de heroísmo y patriotismo al mundo entero.
Cuentan que los niños de 6 a 8 años, en el calor de la batalla, aterrados se agarraban de las piernas de los soldados brasileños llorando, pidiendo que no los matasen, pero eran degollados. No en vano la Guerra contra la Triple Alianza fue denominada por los historiadores como el “genocidio americano”. Esta es la historia de los Niños Mártires de Acosta Ñu, y para conmemorarla, cada año el 16 de agosto se festeja el Día del Niño en Paraguay.