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La trabajadora comentó que actualmente tiene una lista de cien pedidos pendientes que deben ser entregados en los próximo días. Expresó que a diario recibe más solicitudes, pero responde a la medida de las posibilidades.
La pobladora señaló que la confección de los trajes sigue las indicaciones de una médica. La profesional la instruyó en el diseño y el tipo de material a utilizar, que debe tener el mameluco de bioseguridad, explicó.
Indicó que los materiales que requieren el traje son adquiridos de ferreterías de la ciudad. Expresó que debido a la alta demanda se convirtió en una de las principales compradoras de la localidad.
La costurera señaló que ante los numerosos pedidos involucró a toda su familia para que le pueda ayudar con la confección de los trajes. Añadió que los mamelucos tienen una bata especial para la protección total de los trabajadores de blanco.
El precio de cada traje es de G. 200.000, precisó la trabajadora.
Falta de equipos
La mayoría de los profesionales de blanco del departamento de Caaguazú está recurriendo a la trabajadora para la adquisición de los trajes por sus propios medios, debido a la falta de asistencia por parte del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social.
Los médicos expresaron que decidieron recurrir a estas medidas tras la confirmación del primer caso de coronavirus en el departamento.