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Rodríguez agregó que debido a la interpretación dada por el juez Ayala Brun a la ley, mediante el amparo, la firma no podía despachar 76 camiones con 2.000 toneladas de productos, parados en los depósitos fiscales.
Insistió en que la ley prescribe que los certificados de cualquiera de las entidades son válidas, por lo que han obtenido de las instituciones paraguayas, que dicen que los productos de Unilever no contienen tripolifosfato. “La AIDA (Asociación de Industriales Domisanitarios y Afines) reclamó, a través de un amparo, que la Aduana estaba incumpliendo la ley, y entonces el juez interpretó que no era una cosa o la otra, sino una cosa y la otra, entonces las empresas deberíamos presentar los certificados de las instituciones locales y las del país de origen del producto”, dijo.
Añadió que no tramitan el certificado en el país de origen de la mercadería, porque simplemente no los emiten o porque son “incompetentes”. Sin embargo, la razón principal de la negativa sería porque en estos países se sigue usando tripolifosfato.