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LUQUE (Arnaldo Espínola, corresponsal). A más de una semana de haber transcurrido el crimen de la funcionaria judicial María Verónica Antonella Gariazu Escobar (29), la investigación fiscal muestra poco avance. Los familiares de la víctima anunciaron otra marcha para exigir el esclarecimiento del caso.
Sin embargo, los investigadores policiales adelantaron que en el transcurso de esta semana ya se tendrían algunos resultados de la pesquisa.
Las evidencias incautadas de la escena del crimen, así como cruce de llamadas y videos de cámaras de seguridad son analizados por peritos de Criminalística y agentes de la Sección Homicidios de Investigación de Delitos de Asunción.
Según fuentes cercanas a la investigación, la funcionaria recibió múltiples llamadas telefónicas y mensajes de texto en el celular en la tarde del viernes 10 de octubre, un día antes de ser hallada muerta de tres balazos en un automóvil, por lo que están tomando precauciones para actuar.
Unos días después del homicidio de la mujer, los familiares y amigos realizaron una marcha para exigir el esclarecimiento del crimen.
En aquella ocasión, sindicaron como presunta responsable del homicidio a la abogada Ninfa Morales, y pidieron que se la investigue. Sin embargo, la letrada se defendió diciendo que no le pueden involucrar en el hecho. Alegó que se debe investigar al entorno de Verónica para profundizar la pesquisa.
En principio también aparecieron como sospechosos el concubino de la víctima, Diego Coronel, y el exmarido Marcelo Espínola, pero por falta de pruebas fueron liberados.
La investigación dirigida por la fiscala Zully Figueredo y el comisario César Silguero continúa sin resultado, pero todo apunta a que la pesquisa avanza.
La organizadora de la marcha civil, Norma Colmán, adelantó que están analizando una nueva marcha para exigir el esclarecimiento del homicidio de la funcionaria judicial. “Esta noche definimos una nueva manifestación para pedir justicia para Vero, porque vemos que la investigación no tiene el resultado”, indicó.