Siguiendo con el proceso, el Banco Central escogió el diseño deseado mientras que la compañía adjudicada vía licitación pública internacional, en este caso la eslovaca Kremnica, representada en Paraguay por Lewkowitz, se encargó de la acuñación correspondiente. Luego, para poner en circulación los medios de pago, el directorio del BCP sacó otra resolución para la emisión correspondiente. Ese trámite ya corrió por cuenta de la actual administración, a cargo de Germán Rojas.
Nueva licitación
Quejas no formales
Por otro lado, consultamos a Gustavo Cartes, miembro del directorio del BCP, si recibieron alguna denuncia formal de gremios de algún sector de nuestra economía sobre la confusión generada con el tamaño, color e inclusive con el diseño de las nuevas monedas con las más viejas, dijo que solo recogen por los medios de prensa. Agregó que ahora ya no se pueden cambiar porque, por un lado, están solucionando el gran problema de escasez que había y, por el otro, una decisión en dicho sentido representaría una fuerte erogación.
Más de US$ 2 millones
Las nuevas partidas de monedas de diferentes denominaciones representaron al pueblo paraguayo una erogación de US$ 2,4 millones. Ya llegaron 25 millones de unidades de monedas de 50, 30 millones de unidades de G. 100 y 12 millones de G. 500. Comerciantes consultados lamentaron el costo adicional que se dio a estas monedas por parte del BCP teniendo en cuenta que si bien solucionan la escasez de dinero sencillo que se arrastraba desde el año pasado, fácilmente pueden confundir, con el consecuente deterioro patrimonial.