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Según el técnico de la Fundación Solidaridad Latinoamericana, Derlis Zárate, luego de cinco años se registró de nuevo un frío muy intenso, lo que ocasionó grandes pérdidas en el sector ganadero, por el daño a la pastura que sirve para la cría y engorde de los animales. “En total fueron afectados 250 a 300 productores de leche aproximadamente, con un promedio de 50 hectáreas cada uno, pertenecientes a las cooperativas El Quebracho y Campo Aceval”, explicó.
Zárate mencionó que de aquí a un mes la provisión de leche se verá afectada por la escasez de pasturas para alimentar al ganado y que los productores que no se abastecieron de forraje son los que más sentirán las consecuencias.
Mucha siembra de productos de autoconsumo de familias indígenas, como plantaciones de batata, zapallo y mandioca, se perdieron también debido a las intensas heladas. Asimismo, hay datos de que la caña dulce y la leucaena (reserva de forraje) fueron afectados. La fuente indicó que a las pérdidas por heladas se deben sumar ahora las de la sequía en la zona.