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“Solicitamos que una parte de la contrapartida que aporta la ANDE para esta licitación de la línea de 500 kV, que asciende a unos 80 millones de dólares, sea destinado a la fabricación de las torres, separando del resto de los lotes”, explicó el titular del CIME, Ramiro Vargas Peña. Afirmó que para esto no necesitan pedir la aprobación de los organismos financieros que otorgaron el préstamo para la financiación, puesto que se pagaría con dinero paraguayo genuino.
“Esta debe ser una decisión política, en que el único requisito sea que las torres deben ser fabricadas en nuestro país, que lo haga una empresa de origen paraguayo, chino o brasileño, es parte de las condiciones de competencia entre ellas, pero tiene que hacerse en territorio paraguayo y con mano de obra paraguaya, porque esa va a ser la licitación más barata para el país”, señaló.
El empresario indicó que la industria metalúrgica local está en condiciones de abastecer el 100 por ciento de las estructuras solicitadas para esta licitación y todas con certificados de calidad. “El proceso de fabricación se hace con máquinas computarizadas de última generación, que existen hoy en el país. Tenemos cuatro de esas máquinas de alto rendimiento, que fueron chequeadas y revisadas por ingenieros de Itaipú, que inclusive informaron que ni en el Brasil las han visto”, destacó el presidente del CIME.