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El director ejecutivo de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY), el argentino Óscar Thomas, sostuvo en su cuenta de Twitter que hubo que redefinir el proyecto hidroeléctrico en 2003 porque estaba paralizado y sin financiación. Pretendió justificar las sucesivas violaciones al Tratado con el argumento de que los Anexos B y C eran obsoletos.
“Entonces, cuando referimos el Tratado de Yacyretá, de qué hablamos: de un Anexo B y C original (obsoleto) o del resultante a la fecha”, escribe. Luego señala que “Yacyretá mejoró su concepción original para no inundar más territorio paraguayo y generar más, eso incrementó un 29% su costo”, para agregar que si duró mucho más tiempo en concluirse la construcción de la central hidroeléctrica fue porque su plan económico-financiero original era desacertado.
“La matriz financiera de Yacyretá de 1976 se apoyaba mucho en el financiamiento externo y poco en el interno. La realidad fue distinta”, explica Thomas. “El financiamiento interno se impuso en Yacyretá cuando externamente solo había buenas intenciones. Argentina debió asumir lo imprevisto”, agregó.
Según Thomas, la decisión que tomó la República Argentina, cuando apenas salía de los desaciertos de gobiernos anteriores y destinó recursos, con gran esfuerzo, fue con el objetivo de convertir Yacyretá en una herramienta de desarrollo para su país y para Paraguay. “Para financiar a Yacyretá la Argentina debió redireccionar recursos de otros destinos. Resultó difícil, costoso y demandó mucha gestión”, dijo, e insistió en que la razón de la demora en terminar Yacyretá “está en la desacertada estrategia del financiamiento adoptado en 1976 por la EBY”.
Luego sostiene que “el proyecto original de Yacyretá era faraónico, costoso e indefinido. La realidad también le impactó y fue sustancialmente modificado”, concluye Thomas.
“Obra costó 29% más”
A valores de 1976, sin intereses, Yacyretá tenía presupuestado en Obras Civiles y Electromecánicas 1.513 millones de dólares; pero en su ejecución, con modificaciones, terminó costando 1.956 millones; es decir, 443 millones de dólares más, equivalente al 29% del monto inicialmente previsto, señala Thomas en uno de sus tweets. En cuanto a las obras complementarias y el Plan de Terminación de Yacyretá (PTY), afirma que en total se invirtieron 838 millones de dólares, 474% más de lo previsto originalmente.