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En la ciudad de Limpio, donde avanza a paso acelerado la obra de ensanche de la Ruta III “Gral. Elizardo Aquino”, se observa la considerable elevación de la franja con relación al nivel anterior del asfalto, en que se encuentran también las viviendas de la zona.
Esto genera preocupación, pues por la zona pasa uno de los cauces del arroyo Itay y en días lluviosos algunos barrios podrían verse seriamente afectados, pues habría peligro de inundación.
En un informe oficial remitido a los medios el día de ayer, el Ministerio de Obras Públicas asegura que el ensanche de la Ruta III y la circunvalación de Limpio, a cargo de las empresas Benito Roggio y CDD (representadas por Emilio Gil), tienen un 40% de ejecución.
Lo preocupante, en ese sentido, es que la obra concluirá mucho antes de que se terminen las piletas de amortiguamiento que deben servir de reservorio de agua en días lluviosos, para evitar que los arroyos que pasan por la zona, el Itay y Damián, inunden los barrios a su paso.
El ingeniero René Peralbo, responsable de la obra por el MOPC, dijo que el estudio hidrológico de la cuenca de los arroyos Itay y Damián, referidos al impacto que puede tener la obra sobre los barrios, fue efectuado por técnicos japoneses y fue uno de los que acompañó el diseño del proyecto de la obra actualmente en ejecución. Explicó que las piletas de atenuación serán construidas en el Parque Guasu Metropolitano, y con ello se evitará que el agua llegue en demasía hasta Limpio, pues ayudarían a controlar el caudal de los arroyos.
Con relación a las inundaciones que podrían registrarse antes de que se terminen estas piletas, cuya construcción ni siquiera ha comenzado y no estarían listas antes de finales del 2018, Peralbo aseguró que no habrá inundaciones.
“Las piletas van a retener el agua que viene de la zona de calle Última. En ella se depositará el agua de los raudales y después se irá liberando de a poco. Sin embargo, aún mientras no se terminen, no habrá inundaciones”, dijo.
Insistió en que el problema radica en que los municipios siguen loteando zonas inundables en los costados de los arroyos.
Se calcula que el ensanche de la Ruta III concluirá en, aproximadamente, un año.