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Por su parte, el director de la Comisión Nacional del Pilcomayo, Arturo Niedhhamer, sobrevoló todo el cauce de La Madrid, en helicóptero.
Según explicó, el sobrevuelo tuvo como objetivo determinar los puntos críticos a lo largo de la cañada.
Al respecto mencionó que “debemos conocer cada uno de los lugares donde los sedimentos pueden ser un obstáculo para el río”.
Agregó que “vamos a localizar los puntos, medirlos e inmediatamente comenzar a trabajar porque las lluvias ya se nos vinieron encima”.
Tareas pendientes en la embocadura
Por otro lado, una verificación realizada por periodistas de ABC Color, en la zona de la embocadura, permitió comprobar que existen lugares donde la extracción de sedimentos sigue pendiente.
Esta situación se tiene sobre todo en los primeros 10 kilómetros del canal artificial, sector que estuvo a cargo de la empresa T&C SA.
La fiscalización es responsabilidad de la firma Cialpa SA. Un nuevo contrato para T&C solo puede firmarse si termina las tareas pendientes.