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VILLARRICA (Pablo Gastón Ortiz, corresponsal). El juez penal de garantías de esta ciudad, Jorge Garcete, firmó el sobreseimiento definitivo de Rubén Darío Espínola Peralta, Néstor Fabián Paredes Duarte, Catalino Brítez Paiva, Atlair Gómez Flor, Marcos Rubén Delgado Peña, Carlos Vera Martínez y Nelson Martínez Centurión. Todos ellos fueron imputados en el supuesto contrabando de 189.000 kilos de azúcar que fueron incautados por la Policía contra Delitos Económicos en julio de 2012, en un procedimiento realizado en Villarrica.
Un noveno involucrado, Arnaldo Centurión Velázquez, obtuvo una suspensión condicional del procedimiento. El hombre se presentó en nombre de la empresa “Master Agro SA”, reclamando cuatro camiones y la carga de dichos vehículos.
Según los antecedentes del caso, cuatro semirremolques cargados con azúcar que no eran de origen nacional fueron retenidos en la localidad de San Salvador, cerca de la estancia propiedad del ahora gobernador del Guairá, Rodolfo Friedmann Alfaro (ANR). Otros tres camiones se incautaron en Villarrica, a solo unos metros de los portones de la Azucarera Friedmann SA (AFSA); en ese entonces la empresa era liderada por Rodolfo Friedmann Cresta, padre del gobernador.
El caso pasó por las manos de varios fiscales, pero ninguno determinó quiénes eran los verdaderos dueños de la carga y en dónde se pretendía comercializar, a pesar de que varios choferes confirmaron que el azúcar tenía que descargarse en el ingenio de la familia Friedmann.
Nelson Centurión, en su declaración, involucró directamente a la azucarera de Villarrica y su historia también coincide con la de Rubén Delgado, otro de los transportistas que también relató que la fábrica era el destino de la mercadería.
La Azucarera Friedmann SA fue allanada 24 horas después de que los camiones fueran incautadas, pero no encontraron evidencias en el lugar. Rodolfo Friedmann Alfaro, quien entonces era candidato a la Gobernación del Guairá, nunca fue investigado, a pesar de las declaraciones contra la Azucarera que en ese momento él dirigía. El político colorado también estuvo varios meses al frente de la azucarera que lideraba su padre, aunque en la actualidad ambos ya se han desvinculado de la firmas.
Las salidas procesales que beneficiaron a los encausados fueron solicitadas por la fiscala de Villarrica Karina Escurra, que tomó el caso cuando el fiscal del caso, Gustavo Cáceres, estaba suspendido. Posteriormente, la fiscala María Unger fue designada en reemplazo de Cáceres cuando fue destituido por el jurado de enjuiciamiento de magistrados por mal desempeño.
Informe de Aduanas
La actual fiscala titular de la causa del azúcar incautado, María Agustina Unger, explicó ayer a ABC Color que no pudieron sostener una acusación, ya que no contaban con el dictamen de la Dirección Nacional de Aduanas (DNA) que confirmara la existencia de contrabando. Según Unger, el informe del ente desvinculaba a los procesados.
Aclaró que tomó el caso cuando ya había finalizado la etapa investigativa y se ratificó ante el juez Jorge Garcete sobre el sobreseimiento provisional para los choferes de los camiones y la suspensión condicional para el supuesto dueño de una parte de la carga.