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El dirigente gremial insta a los propietarios de supermercados de todo el país a que “sean más nacionalistas”, defiendan los puestos de trabajo de los paraguayos y así mantener los empleos dentro del territorio nacional y, en consecuencia, la seguridad de todos, especialmente para el sector privado empresarial.
Agregó que los supermercados se quejan de que también tienen graves problemas de ventas. “Pero cómo no lo van a tener si una gran mayoría de paraguayos no trabajan y no tienen dinero para gastar, y la poca plata que existe es destinada a la compra de productos importados y de contrabando; y finalmente ese dinero va a parar en las manos de trabajadores y obreros brasileños y argentinos”, dijo.
Acerca de qué habría que hacer para “incentivar” la compra de productos nacionales, Doutreleau contestó: “En el mes de octubre del año pasado se llevó a cabo una experiencia muy interesante (campaña anticontrabando de 45 días, denominada “Paraguayo como vos”, impulsada por la Cámara Paraguaya de Supermercados y la Unión Industrial Paraguaya), en la que los productos nacionales participantes pudieron tener “alta visibilidad” en las góndolas, y con resultados muy satisfactorios”, afirmó.
El titular de los domisanitarios sugirió que este tipo de campañas continúen, separando los productos importados de los nacionales, de manera que no se confunda a los consumidores. Dijo que en materia de bebidas están muy bien separadas, como caña, vino, whisky, licores, etc.
Al señalársele que los espacios en los supermercados al parecer son cedidos prácticamente “al mejor postor”, Doutreleau manifestó que la industria nacional no puede competir con las multinacionales, que tienen recursos “casi ilimitados” para publicidad y para comprar todos los espacios, si quieren.
El empresario compatriota afirmó, igualmente, que a esta especie de “inequidad” entre lo nacional y lo importado, en el manejo de los espacios en los supermercados, se ha sumado el hecho de que, mientras en nuestro país se facilita la importación, en especial desde nuestros grandes vecinos, ellos no actúan con reciprocidad.