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Estos intentos y otros han fracasado, señaló González Chirico, en casi tres años de chantaje económico. El grupo Taselli quiere lograr la complicidad de Cootrapar para simular una venta a sus testaferros, indicó. “Pero necesitan cancelar los compromisos en el sentido de recibir las acciones de Acepar y olvidar los delitos cometidos al eludir la obligación de autoabastecerse de carbón reforestado. La situación es grave, pues la ley 716/96 artículo 5 inciso d; artículo 10, c; artículo 14, a,b,e; y artículo 15, establecen penas de cárcel y además la inhabilitación para ejercer cargo público para las autoridades cómplices”, subrayó.
“Cootrapar ha recibido emisarios para la venta de las acciones al supuesto comprador de Acepar. Como la situación económica de Cootrapar es delicada debido a la situación de la mayoría de los socios, Acepar no entrega las retenciones de salario de enero y febrero, que según resolución judicial debía entregar el último día hábil del mes. El monto adeudado por dos meses no supera los G. 80 millones”, agregó.
Como consecuencia, no se paga salarios ni IPS. Hasta los servicios serían cortados por la no entrega de los recursos de Cootrapar retenidos a los socios que aún trabajan en Acepar.
Para González Chirico, el objetivo es claro: cuando termine el acuerdo con el Gobierno, Cootrapar no pueda negarse a la propuesta del grupo Taselli.