Cargando...
Finalmente, a las 23.00 del martes último, se levantó la huelga que mantenían desde el 2 de mayo pasado los miembros de la Unión Tranviaria Automotor (UTA) de Argentina, al llegar este gremio a un acuerdo con el gobierno del citado país. La medida de fuerza obedeció a la exigencia de mejores salarios y a obtener mayores reivindicaciones para los trabajadores del sector transporte de larga distancia de la Argentina.
Retraso y pérdidas
Según datos que maneja la Cámara Paraguaya de Transporte Internacional Terrestre (Capatit), cerca de 10.000 pasajeros –entre paraguayos y argentinos– no pudieron emprender viaje, ya sea desde Asunción a cualquier punto de la Argentina o volver del país vecino a la terminal de Asunción, a causa de la medida de fuerza.
De acuerdo a lo expuesto por Ricardo Fustagno, titular de esta agremiación, se calcula en unos 700.000 dólares la pérdida para las empresas de transporte paraguayas que se vieron afectadas por la medida de los sindicalistas argentinos.
En total son 11 las empresas nacionales que operan en el trayecto Asunción-Buenos Aires y sus respectivas conexiones. La mayoría estableció desde ayer un nuevo cronograma de salida de colectivos, teniendo en cuenta la cantidad de personas que se quedaron sin poder viajar.
Sistema para devolver pasaje
Fustagno adelantó que los integrantes de la Capatit se comprometen a devolver el 100% de los pasajes a los clientes que ya adquirieron los boletos con anterioridad. Para tal efecto, pidió que se comuniquen con las empresas de las que compraron sus pasajes y establecer ya sea la devolución o el cambio del boleto para viajar de nuevo.
Atendiendo el retraso que se tuvo por los cinco días de huelga, desde la Terminal de Asunción están viendo la forma de establecer un sistema de salida más rápido para los colectivos, de tal forma a tratar de regularizar el flujo de camiones que van a la capital argentina.
Varios ómnibus de empresas paraguayas fueron apedreados cuando al iniciarse esta huelga quisieron pasar por Formosa para ir a Buenos Aires. Debido a esta situación, la Capatit decidió que ningún otro colectivo salga con destino a Buenos Aires hasta que se solucione el conflicto, lo que finalmente ocurrió en la noche del martes.