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ASUNCIÓN (EFE). “La mayor cantidad de inversiones de uruguayos está en Paraguay y la nueva conexión aérea va a fortalecer está relación (...). Hay una gran expectativa por parte de los empresarios uruguayos ”, declaró Perazza.
Añadió que la nueva oferta propiciará también un fortalecimiento de las conexiones aeronáuticas entre Paraguay y Uruguay, dado que “tienen una política de cielos abiertos”. Destacó luego que con ello se consolidarán más las relaciones bilaterales entre Paraguay y Uruguay.
Perazza resaltó el hecho de que la mayoría del personal de Alas Uruguay está integrado por extrabajadores de la empresa de aviación uruguaya Pluna, que en 2012 dejó de operar por problemas financieros.
“Queremos apoyar una ruta aérea de bandera uruguaya y recuperar una línea, la exPluna, en la ruta más rentable en términos de pasajeros y de bodega”, indicó el embajador.
En ese sentido, Perazza expresó que la entrada de Alas Uruguay en esa ruta, que también está cubierta por la boliviana Amaszonas, creará un descenso de los precios del pasaje.
Además, el diplomático uruguayo agradeció a las autoridades paraguayas el apoyo prestado a la hora de hacer realidad el proyecto.
“Hace un año que estamos detrás de todo el proceso de certificación de Alas en Paraguay, y siempre hubo una total predisposición por parte de las autoridades locales y de la Dirección Nacional de Aeronáutica Civil”, dijo Perazza.
Inicio
Está previsto que el vuelo de hoy desde Montevideo, que durará alrededor de hora y media, llegue a Asunción a las 15:00 hora local (19:00 GMT) y que tenga entre sus pasajeros a directivos de Alas Uruguay y al viceministro de Turismo uruguayo, Benjamín Liberoff.
En el aeropuerto internacional de Asunción se organizará un recibimiento especial, en el que el aparato recibirá el tradicional bautismo con el arco de agua formado por los carros hidrantes de los bomberos, y posteriormente habrá intervenciones de representantes del Gobierno paraguayo.
La empresa uruguaya de aviación Pluna dejó de operar en julio de 2012 por problemas financieros, aunque la mayoría de su personal se mantuvo en contacto y logró el respaldo necesario para crear Alas Uruguay.
En mayo de 2014, los antiguos empleados se constituyeron en sociedad civil y alcanzaron un acuerdo con el Gobierno uruguayo que les permitió acceder a una línea de crédito de 15 millones de dólares del Fondo para el Desarrollo (Fondes), que sirvió para poner en marcha la compañía.