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“El presidente (del Indert, Justo Cárdenas) me dijo: Me están apurando los diputados por dos (ONG) que no metió, que sabía que tenía que meter, Oriente y Hambre Cero”, señala el audio de David Bogarín, hablando sobre los proyectos de construcción de sistemas de agua potable, gestionados con la intermediación innecesaria de los Organismos No Gubernamentales y financiados con el Fondo de Inversiones Rurales para el Desarrollo Sostenible (Fides). La administración actual del ente agrario, tal y como lo hicieron sus predecesoras, realiza transferencias directas a fundaciones, asociaciones y comisiones para construir dudosas obras en las colonias y asentamientos del interior, eludiendo las licitaciones y otros mecanismos de compra previstos en la Ley 2051 de Contrataciones Públicas.
En conversación con nuestro diario, Bogarín afirmó que nunca interfirió en el tema de los pozos y que tampoco pidió por la adjudicación de ninguna organización. “No sé qué decirte porque no tengo ninguna ONG amiga. Si alguna vez me pidió el presidente que se trate en la Junta, eso puede ser, pero otra cosa no”, afirmó el director de Gabinete.
Según otras fuentes cercanas al instituto rural, algunos de esos diputados que están involucrados en el negocio de los pozos serían Freddy D’Ecclesiis, Celso Troche, Alsimio “Toti” Casco, Luis Alberto Sarubbi y hasta el senador Nelson Aguinagalde, quien supuestamente envía al instituto, para hacer las gestiones, a su secretario Rodrigo Rojas.
Arbitrariedades
Además de las aparentes intervenciones de los legisladores, también se verifica que la adjudicación para la construcción de pozos se realiza de manera arbitraria, según se escucha en el segundo audio filtrado, que correspondería a Santiago Ochipinti. “Ese de Resedá Poty tiene que entrar otra vez. ¿Te acordás ese que tenías que cambiar tu dictamen?”, señala el funcionario en conversación con un interlocutor, quien aparentemente posee poder de decisión sobre qué ONG elegir. Y agrega otra declaración que desnuda el verdadero mecanismo de aprobación de proyectos, según el cual primero se construyen las obras y después se pide permiso a la Junta Asesora y de Control: “Forest tiene que entrar a aprobarse. Son pozos que ya se habían hecho y que tienen que entrar en la lista”.
Ochipinti había acordado dar una entrevista ayer a nuestro diario, pero no nos atendió en todo el día, por lo que fue imposible tener su versión sobre los audios. Se trata del funcionario involucrado en la denuncia sobre una aparente coima documentada, que se había depositado en su cuenta bancaria y cuyas boletas de depósito publicó nuestro diario días pasados. Asimismo, quisimos conversar con los legisladores, pero tampoco pudimos dar con ellos en sus teléfonos celulares, pese a las insistentes llamadas.
En cuanto a las ONG, según nuestras fuentes, en la mayoría de los casos son alquiladas por las personas que están detrás del negocio de los pozos. Si bien Cárdenas niega que se esté malversando los recursos del Fides, los fuertes indicios que van apareciendo sugieren todo lo contrario.
gbenitez@abc.com.py